Sigue en firme el proceso penal contra las 11 personas señaladas de hacer parte de una red de explotación sexual de mujeres en la el sector de la Torre del Reloj, en el Centro Histórico de Cartagena.
Entre los procesados se encuentra la mujer trans conocida como Maura Llega, quien es creadora de contenido para redes sociales y quien le indicó a este medio que se considera inocente. Vea: Video: Así desarticularon red de explotación sexual en Cartagena
Las 11 personas (entre ellas dos mujeres trans, cuatro mujeres y cinco hombres) haría parte de una organización denominada los Caleños y fueron capturadas en un megaoperativo de la Dijín de la Policía el pasado 20 de abril.
Al día siguiente estas personas fueron presentadas ante el juez Cuarto Penal Municipal de Garantías de Cartagena, una diligencia que se extendió por varias horas y que terminó con la legalización de las capturas y los procedimientos de allanamiento.
El 26 de abril en la tarde empezó la audiencia de imputación de cargos contra los procesados, que se extendió hasta la tarde del viernes 28, cuando llegó a uno de los puntos claves. Lea: Arranca imputación contra Maura Llega y otros presuntos miembros de red
La Fiscalía solicitó al juez que lleva el caso la imputación de cargos a los procesos por los delitos de trata de personas, concierto para delinquir agravado y constreñimiento a la prostitución. A algunos también les imputaron el cargo de falsedad en documento.
Tras la imputación de cargos, la audiencia se suspendió y continuará el próximo martes 2 de mayo.
En Atlántico
Hay que señalar que entre los procesados está una mujer a la que le venían siguiendo la pista desde hace varios meses, quien es señalada de inducir a mujeres a la prostitución.
Las indagaciones dejan ver que esta mujer estaría al servicio de la red en el departamento del Atlántico. La mujer se movía en el municipio de Malambo, donde, presuntamente, captaba mujeres para que se prostituyeran en Cartagena.
Cabe recordar que la Policía ha señalado que estas mujeres que se prostituían eran obligadas a dar hasta el 60% de las ganancias a miembros de la red tras prestar servicios sexuales a extranjeros en Cartagena.
Ocho víctimas de esta red fueron rescatadas por las autoridades. Sus testimonios hacen parte de las investigación.