Los habitantes del barrio Las Delicias decidieron poner un aviso en el tramo de andén que les corresponde a orillas de la avenida del Consulado.
El aviso, conformado con un balde lleno de piedras, con las cuales se sostiene la tabla de madera donde pegaron el letrero, exhorta a respetar las cebras y los reductores de velocidad.
Explicaron que tomaron esa decisión, al ver que sus quejas ante las autoridades no han surtido efecto, dado que sus casas se siguen rajando por la vibración que provocan los buses de Transcaribe.