Cuarentenas estrictas, cirugías ambulatorias suspendidas, atenciones médicas virtuales, esfuerzos por ampliar capacidades y camas de Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) en hospitales; mejoramiento de infraestructura y mayores atenciones a la salud mental se vivieron en un año de pandemia.
Estos acontecimientos trajeron consigo lecciones aprendidas y desafíos para diversos sectores, principalmente para el de la salud. Cartagena y Bolívar arrastraban problemáticas desde antes de la pandemia que se incrementaron, como la insuficiente infraestructura en centros de salud y la calidad de atención.
“Uno de los mayores retos es recuperar la infraestructura hospitalaria de primer nivel de atención, desde donde hemos enfocado nuestras acciones. Ante el Ministerio de Salud presentamos el documento de modernización, rediseño y organización de la red pública, estamos en la consecución de recursos”, explicó la directora del Dadis, Johana Bueno Álvarez.
Con esto, según indicó la directora, esperan dejarle a la ciudad una red hospitalaria optimizada, al menos iniciada, que no tenía actualización desde 2012. Se espera entregar 12 centros hospitalarios.
Desde la perspectiva del secretario de Salud departamental, Álvaro González Hollman, es importante basarse en los mejores sistemas de salud del mundo que tienen como foco el autocuidado, la atención básica y la prevención básica de enfermedades.
En esta línea se da la primera lección. Para el médico neumólogo, intensivista, Carmelo Dueñas Castell, la atención primaria es fundamental y aún hay un largo camino por recorrer.
“Tenemos carencia de acueducto, alcantarillado, disposición de excretas y educación. Esta última podemos desarrollarla como personal de salud y sociedad, fundamentales para cualquier estrategia de prevención de enfermedades de transmisión o las de no transmisión”, dijo.
Para este especialista, la salud de la población depende, en gran medida, de la vivienda, las condiciones básicas, el agua potable, la igualdad y el grado de pobreza. “En esto Bolívar y Cartagena no están muy bien a nivel nacional, ni Colombia a nivel Latinoamérica. Sin embargo, en cuanto a indicadores de salud en la ciudad y el departamento, la mayoría estaban mejores que el promedio nacional”.
La atención primaria, según la Organización Panamericana de la Salud, aborda la salud y el bienestar físicos, mentales y sociales de una forma global e interrelacionada para personas, familias y comunidades. Es decir, concebir la salud desde la promoción de hábitos saludables y prevención de enfermedades.
Esta segunda lección se alinea a la primera, pues para conseguir una buena atención primaria se necesita el trabajo en conjunto de entes territoriales, empresa privada, gremio de salud y otros.
“Este tema va más allá de un prestador de servicio. La atención que se le da a la población y el costo asumido como medicina prepagada le quita un peso al sistema de salud, para que este atienda a una mayor cantidad de personas”, mencionó el presidente ejecutivo de Medplus, Hernando Botero.
Su afirmación se basa en datos de la Federación de Aseguradores Colombianos (Fasecolda), que indican que de marzo de 2020 al 31 de abril de este año, se han reconocido en atención más de $635 mil millones y se espera que al finalizar el año sea un billón de pesos. De esos recursos, el 45% han sido para salud.
“Sabemos que el sistema enfrenta riesgos enormes, aparte de la pandemia, como envejecimiento de la población, enfermedades crónicas no transmisibles que no se han atendido de la manera adecuada porque estamos concentrados en lo urgente, que es el COVID-19. Ahí creo que hay un papel fundamental en la empresa privada”, resaltó el también ingeniero de mercados.
Uno de los énfasis, tanto de la directora del Dadis en Cartagena como del secretario de Salud del departamento, es que los planes de desarrollo estén articulados para una mejor prestación de servicio.
Cada día la calidad en los servicios de salud se afecta más, por ello se necesitan fuerzas para que las personas tengan más confianza en el Sistema General de Seguridad Social en Salud y en los territorios.
“Necesitamos un reporte que supere estos obstáculos y que sea con calidad, donde todos estamos incluidos”, resaltó el secretario de Salud de Bolívar.
Johana Bueno distinguió que Cartagena busca instalar una gestión de riesgo individual y colectivo, para una correcta promoción de la salud y prevención de la enfermedad.
La tecnología es una gran aliada para este sector y se reafirmó con la pandemia, por lo que en la ciudad y el departamento tomaron la telemedicina como una oportunidad de mejora.
A través del Decreto 538 de 2020, el Ministerio de Salud y Protección Social adoptó, entre otras medidas, la telemedicina y el uso de plataformas digitales para tales fines.
“Como entidad territorial lo vemos como una oportunidad para implementar una herramienta tecnológica que permita mejorar el acceso y la oportunidad en atención, sobre todo en comunidades donde no se cuenta con una infraestructura adecuada para que cada una de las necesidades de las poblaciones sean atendidas”, destacó Bueno Álvarez.
A su vez, recordó que esta modalidad debe contar con infraestructura tecnológica para garantizar tanto la confidencialidad como la seguridad en la información.
“Es muy buena oportunidad, no solo de avanzar en cuanto a tecnología en el departamento, sino que se quedará para sumar herramientas y obtener una efectiva calidad en servicios de salud que recibe la población”, adicionó González Hollman.