La red de Destinos Turísticos Inteligentes fue creada por la Secretaría de Estado de Turismo de España y El Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, a través de la Sociedad Mercantil Estatal para la Gestión de la Innovación y las Tecnologías Turísticas (Segittur). Es una red que en la actualidad tiene más de 70 miembros a nivel internacional, cuyo objetivo es liderar, desde la sostenibilidad, el desarrollo del sector turístico a través de la innovación y la tecnología.
En Colombia, Medellín sería el primer Destino Turístico Inteligente (DTI) y por ello está trabajando en evaluar la gobernanza, sostenibilidad, accesibilidad, innovación y la tecnología en sus atractivos. ¿Cómo quieren lograrlo? Se requiere liderazgo y planificación; apoyo y cooperación y, por último, evaluación y mejora (creación de un eje gestor público o privado encargado de fomentar, planificar y coordinar el desarrollo turístico).
“Pertenecer a la red de Destinos Turísticos Inteligentes le abre las puertas a la ciudad, al pertenecer a una red en la que puede compartir información y conocimiento, para que se mejoren los procesos y las experiencias a los turistas. También le da el reconocimiento de ciudad sostenible, que ha trabajado en pos de que la comunidad se encamine hacia el cuidado de sus recursos”, explica Juan Enrique Henao, colaborador IDITUR de Ostelea.
Turistas e instituciones privadas o públicas logran que esto sea posible. “El turista y ciudadanos hacen parte de las experiencias que se dan de forma sostenible. Se consulta por medio de bases de datos, se tiene en cuenta la interconectividad, sitios donde se alojan, en pro de tomar decisiones más conscientes para venderse mucho mejor. Por ejemplo, en esta coyuntura, no solo preocupa la parte de sostenibilidad, sino la de bioseguridad”, añade Juan Enrique Henao. La construcción de DTI está ligada a la protección de la ciudadanía y los turistas en la cesión y gestión de datos.
- Internet gratis en la ciudad.
- Sistemas de transporte integrado.
- Recolección y manejo adecuado de basuras y energías limpias.
- Aplicaciones para compra de entradas de eventos culturales.
- Sistemas de movilidad verdes como las bicicletas, entre otros.
Así, la tecnología no solo optimiza los servicios turísticos, sino que es una herramienta para la sostenibilidad.