Cuatro años de feliz matrimonio celebrados como cualquier fanático del fútbol desearía, acompañando en el Mundial a la selección. Porque claro, Alexandra puede ser la mujer perfecta para cualquier hombre, pero la pasión que siente por ese deporte es un increíble valor agregado.
Preparados para un viaje que nadie imaginaba tan largo, y acompañados por una pareja amiga, Alexandra y su esposo Marcelo recorrieron seis ciudades brasileras, vibrando con la increíble actuación de James, Cuadrado, Yepes y los demás héroes colombianos. Una experiencia de amor profundo que reafirma un lazo, pero también la oportunidad para sentir cómo el mundo entero vuelca sus ojos hacia nosotros.
“Nuestro matrimonio está muy bien, gracias a Dios. Y fue delicioso celebrarlo en Brasil, porque desde el principio la idea era acompañar a la Selección… y la seguimos a todos los partidos. Esto nos permitió conocer seis ciudades y en todas ellas nos dimos cuenta que Colombia está de moda.
Porque claro –recuerda emocionada-, ibas por la calle con la camiseta y te aplaudía gente de todas partes del mundo: irlandeses, australianos, alemanes; todos querían cambiar la camiseta, todo el mundo hablaba de la Selección”.
Sin embargo, después del gusto que venga el… trabajo acumulado con Zona Trendy, programa que presenta en el canal de entretenimiento E!, y el cubrimiento de Colombiamoda. También retomó sus charlas en diferentes empresas, en las que les enseña a hombres y mujeres lecciones de cómo vestirse bien y desenvolverse en público.
“Ahora soy más atrevida con mi estilo”
Una semana después de llegar de Brasil, Alexandra estaba cubriendo Colombiamoda; feria que ama, pues siente que la refresca con nuevas tendencias. Naturalmente, ser testigo de la evolución de la moda colombiana es increíble para ella, y dice haberlo visto claramente este año en cada pasarela, con cierto cambio en el rumbo de los diseñadores.
El riesgo es uno de los nuevos rasgos, precisamente; la exigencia y pulcritud, otras de las cualidades que destaca. Y por supuesto, en parte gracias a ella, considera el poder de sorpresa que tuvo cada pasarela. “Eso lo hace más interesante, porque siento que ya no somos seguidores de tendencia, ahora somos creadores”, dice orgullosa.
Sus recomendados después de haber vivido la feria en Medellín son Faride Ramos, inspirada en Mompox para su colección 2014; Camilo Álvarez, quien abrió la feria con su colección Desayuno; y Kika Vargas, indiscutiblemente una de sus favoritas. “¡Nada qué hacer! Con ella me siento viendo una pasarela de otro lugar. Pero también me gustaron diseñadores consagrados como Johanna Ortiz, quién cerró con una colección espectacular, y Beatriz Camacho, inspirada en La Polinesia. ¡Y se me quedan muchos por fuera!”.
En resumidas cuentas, lo que confirmó es que esta segunda mitad del año viene la tendencia a inclinarse por prendas más divertidas, con movimiento y color. Prendas que dan testimonio de una mujer de espíritu libre, que ve en cada viaje la oportunidad de recoger historias que interactúen con su estilo. Tal cual -resalta Alexandra-, como lo dejó claro la caleña Johanna Ortiz.
La moda es un lenguaje y tras su experiencia de años presentando un programa como Zona Trendy -que es “lo más” en tendencias-, puede decir que tanto su estilo como su visión de la moda se han fortalecido, por lo que disfruta -como nada-, enseñárselo a los demás.
“Gané seguridad porque siempre se aprende de los demás procesos, y nos damos cuenta a través de ellos de nuestro propio tema. Antes vivía muy atada ‘al qué dirán’, y empecé a preguntarme ¿cómo me siento?, ¿qué quiero comunicar?, ¿cómo me quiero ver? Ahora soy más atrevida con la moda, me gustan las propuestas frescas, me aburren cosas como que todo el mundo use rayas si están de moda.
Una empresa emergente
Nova Branding creció con el ‘voz a voz’. Su primera clienta pidió asesoría completa para su matrimonio, y con la formación que la presentadora tiene en Programación Neurolingüística y coaching, fue muy útil comenzar por esclarecer sus miedos e inseguridades. Luego sí la asesoraron en la elección del vestuario y todo quedó tan maravilloso, que desde entonces hacen lo mismo para otras personas. De hecho, algunas empresas la comenzaron a llamar para que diera charlas sobre diversos temas.
- ¿Cuál es la clave al elegir qué ponerse?
Básico, estar cómodo. Porque la moda es hermosa, pero para el día a día hay que estar cómodas. Muy bien querer marcar un estilo propio, porque cuando se imita algo se nota y no se ve chévere. A mí por ejemplo, el trabajo no me exige elegancia y puedo estar tranquila, pero unos buenos zapatos y una buena cartera siempre te dejan bien.
La moda es un lenguaje; si me siento triste o mal, o si soy inseguro, seguramente preferiré el negro. Es difícil que una persona insegura use un naranja o un verde limón porque su personalidad no los sostiene. Hay que ser asertivos con los colores y saber qué queremos comunicar.
- ¿En qué se desacierta más?
Seguir la moda sin pensar si queda bien con el tono de piel, ojos y pelo. Cuando conocemos nuestro cuerpo escogemos mejor y respetamos el entorno.
- ¿Por qué es importante tener en cuenta algo como los colores?
Los colores tienen cierta capacidad, dependiendo del diseño de las prendas, para dar o quitar brillo. Por ejemplo, el blanco (que es el nuevo negro) a una mujer morena, bronceada o blanca de una tonalidad rosa, le queda divino; en cambio, a una mujer tipo oliva o pálida no le queda tan bien, a menos que lo mezcle con otro color que dé vida.
-¿Qué recomienda para esta segunda mitad del año?
¡Usar vestidos! A las mujeres se nos olvida resaltar eso femenino y glamuroso con que nacimos. Así que buenísimo volver a las faldas entre el tobillo y la rodilla de los años 30, las faldas largas, y otras cortas, pero no tanto, para hacer sobresalir esa sensualidad delicada.
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