Para algunas personas constituye un escándalo que las candidatas al Reinado de la Independencia pasen por el bisturí y es que, una joven de un barrio popular no cuenta con los recursos económicos para costear una cirugía. El Reinado de la Independencia nació en el año 2003 con el proceso de Revitalización de las Fiestas de Independencia que lideró el sector cultural de la ciudad, hoy direccionado por el Instituto de Patrimonio y Cultura de Cartagena, IPCC y su comité asesor. Desde el año de 1937, cuando se coronó la primer Reina Popular, Amira Mouthón Barrios, que representaba al barrio de San Diego, el reinado ha pasado por distintas etapas, unas gratas y otras no tanto. Del antiguo Reinado Popular no quedó sino el mal recuerdo, de quienes vivieron en la época que antecedió a los años 90, por el ambiente parrandero que reinaba, propiciado por los concejales de turno que lo manejaban, recuerda Hermes Figueroa, periodista de El Universal. Hoy se respira otro ambiente, menos de parranda y más de cultura, donde las candidatas al Reinado de la Independencia cumplen una función social como multiplicadoras del valor histórico, las tradiciones populares y la dinámica cultural de las festividades; en últimas, la razón de ser de celebrar la independencia que lograron los lanceros de Getsemaní, librándonos del yugo español. Sin embargo, el Reinado de la Independencia se fortalece cuando figuras como Jeimy Paola Vargas, candidata del barrio Chapacuá en el año 2002, es elegida Reina Popular (todavía no se cambia el nombre a Reinado de la Independencia) y se rompe un paradigma en la historia clasista de la ciudad, porque por primera vez una Reina Popular representa al Distrito de Cartagena en el certamen nacional. Y qué debut el de Jeimy Paola Vargas. Como candidata de Cartagena al Reinado Nacional, logró coronarse Virreina Nacional en el 2003 y remata con corona extranjera al año siguiente en Miss Internacional. Le sigue los pasos Giselle Marín, quien fue coronada Reina de la Independencia en el 2007 y el año pasado representó al Distrito de Cartagena en el Concurso Nacional de Belleza. Estos hechos demuestran que una candidata de un barrio popular puede darse a conocer a través del Reinado de la Independencia y abrirse puertas inimaginables. Las cirugías Este año las 25 candidatas a la corona de la independencia se han caracterizado por la notoria preparación física e intelectual que le han impregnado a su rol de reinas. La candidata del barrio Nuevo Bosque, Elida Patricia Castro Herrera, afirma que sí ha notado la competencia entre sus compañeras. “Yo antes como espectadora del reinado veía a una niñas de barrio y ya. Ahora somos niñas de barrio pero preparadas. Toda niña que participa en el Reinado de la Independencia quiere ser Señorita Cartagena y para eso requiere de más preparación física”, afirma la representante de Nuevo Bosque. Más preparación física que incluye además del cliché del gimnasio y la dieta, una que otra cirugía plástica como lo hacen las candidatas que participan en el Reinado Nacional de la Belleza. Eso afirma la representante de Torices, Liz Marie Padilla Bermúdez, quien dice que si las reinas nacionales se operan, ¿por qué las de la independencia no?. ¿Por qué las candidatas al Reinado de la Independencia no se pueden o podrían operar?. Para algunas personas constituye un escándalo que las candidatas al Reinado de la Independencia pasen por el bisturí; y es que, una joven de un barrio popular no cuenta con los recursos económicos para costear una cirugía, eso objetan algunos y sería lógico. Es que las cirugías plásticas llegaron al Reinado de la Independencia. Algunas candidatas lo ven con buenos ojos, otras no están de acuerdo pero lo respetan y el resto piensa que es una especie de trampa de quienes se lo practican porque lo consideran una especie de competencia desleal. La candidata de Chapacuá, Geraldine Álvarez Hernández, no está de acuerdo con las cirugías, no se haría una porque prefiere presentarse al concurso como Dios la trajo al mundo. “Le doy gracias a Dios con lo que me dio, así tenga una imperfección que también haría parte de la belleza”, expresa la representante de Chapacuá, quien agregó que le ofrecieron hacerse la cirugía del busto “pero dije que no”. A lo que sí le apuesta Geraldine Álvarez es ir al gimnasio, a la peluquería y al spa del Hotel Hilton, donde se prepara con reconocidos expertos en belleza. La representante del barrio El Líbano, Gloria Isabel Díaz Mercado, asegura que no está de acuerdo con las cirugías, que no tiene cirugías y siente que no las necesita. Lo que sí piensa es que sus compañeras deberían concentrarse en trabajar por sus barrios y por la cultura de la ciudad que es el fin del Reinado de la Independencia. “La niña que gane el reinado debe cumplir su ciclo y trabajar arduamente por la cultura de Cartagena y después verá si quiere o no, ser Señorita Cartagena, modelo o actriz”. Viviana Patricia Rodríguez Morales, candidata del barrio Olaya Herrera, sector 11 de Noviembre, dice que respeta a sus compañeras que tienen cirugía, que no es ningún pecado y aunque no tiene porque se siente bien con sus atributos, confiesa que no le gusta un huesito que tiene en la nariz. También afirma que no se puede negar lo obvio: “nos guste o no, el reinado abre puertas en muchos campos, ya sea en el modelaje o representando al Distrito en el reinado nacional”. La participante del barrio 9 de Abril, Catherine Osorio Rodríguez, no tiene cirugías pero piensa que si una persona se siente bien haciéndosela que lo haga. Reconoce que el factor económico es importante y confiesa que por muchas rifas o bingos cerveceros o salseros que se hagan en los barrios para recoger fondos, eso no logra costear la participación en el certamen. De lo que no hay duda es que algunas candidatas tienen más recursos que otras y eso se nota en las fotos, en los afiches que se observan en las vitrinas de los almacenes de la ciudad y en los pendones gigantes con sus fotos que sus comitivas llevan a los preludios. Lo cierto es que las cirugías plásticas llegaron al Reinado de la Independencia. La candidata del barrio Torices, Liz Marie Padilla Bermúdez, afirma “yo tengo cirugía de busto, hace dos años me la hice y estoy feliz”. La candidata del barrio España Yeimi Paola Pérez Álvarez, recientemente se operó la nariz. Ella asegura que el cambio no fue extremo sino que lo hizo para destacar la belleza de su rostro. “Yo estoy de acuerdo con las cirugías siempre y cuando sean para sentirse bien con uno mismo, no para agradar a los demás”, dice la representante del barrio España. De todas formas la duda queda: ¿las cirugías plásticas son bienvenidas al Reinado de la Independencia?, ¿Constituyen una evolución del certamen o generan polémica por cómo se costean?.
Facetas
Llegaron las cirugías plásticas al Reinado de la Independencia
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