Durante una fiesta en honor al segundo aniversario del Hotel Boutique Don Pepe en Santa Marta, Iván Villazón mostró su personalidad cálida y extrovertida. Es el alma de la fiesta; esa persona que apenas llega se convierte en el centro de las risas y anécdotas.
Eso sí, una persona “recta en sus cosas”. “Lo aprendí de mis padres” dice el artista. “Me gustan las cosas bien hechas”.
El panameño Rubén Blades escribió hace varios días: “A Iván Villazón, Checo Acosta y al grupo Kvrass y demás músicos que pudieron verse afectados, espero puedan perdonarnos. Nunca fue nuestra intención abusar de su paciencia, ni aprovecharnos de su tiempo, o desconocer su derecho”.
En el pasado Carnaval de Barranquilla, Villazón sería homenajeado, pero por lo que considera una falla por parte de los organizadores del Festival de Orquestas, no pudo siquiera subirse a la tarima. Antes de él, el ídolo Rubén Blades se tomó el escenario y extendió por hora y media su presentación, sin saber que a continuación el Checo Acosta, el grupo Kvrass y Villazón, también cantarían.
“Leí las declaraciones de Rubén. Me parece que fueron unas declaraciones súper acertadas y quedó muy claro que él no tuvo ninguna responsabilidad”, expresa.
Los asistentes se preguntaban qué pasaba y de hecho el mismo Iván no encontraba la explicación, pero claro está, el cantante vallenato nunca pensó mal de su par panameño. “Nunca pensamos que hubiese sido culpa de él porque uno antes de que se sube a la tarima sabe cuánto tiempo tiene para terminar su presentación y es imposible que se vaya a sobrepasar hora y media”, dice totalmente convencido.
Con el tono de quien apenas asimila algo que en su momento causó una inesperada decepción, Villazón comenta, “queda claro que cuando se subió a la tarima nadie le dijo por parte de los organizadores que después de su presentación venía un homenaje para Iván Villazón. Queda claro que hubo falta de comunicación; le dieron a entender que él era el último y que podía continuar su show. Es absolutamente comprobado que él no tuvo la culpa de nada”.
Barranquilla y su Carnaval este 2015, le dejaron al cantante un mal sabor de boca. “Hay tristeza porque no pudimos hacer el show, es decir fue un homenaje ofrecido, no fue un homenaje pedido. Me llamaron para hacerme el homenaje y tuvieron que convencerme porque yo no quería, entonces acepto el homenaje y mira lo que pasa”.
Un mesero se acerca con un ofrecimiento y Villazón le da una cortés negativa. Piensa un poco y continúa. “Parece que esto debe servir es más bien para que la organización del Festival de Orquestas tome medidas porque no solamente están fallando conmigo sino con muchos artistas, mira toda la inconformidad que se ha manifestado con respecto a la organización del Carnaval, las comparsas, la batalla de flores. Es claro que hay una falta de liderazgo en el Carnaval y es una lástima porque es una fiesta hermosa”.
Seguirá gozando el Carnaval
El artista vallenato, que escogió la música sobre su carrera de derecho, sigue ofreciendo al público su música y volverá a la arenosa para su fiesta más importante.
En el Festival de Orquestas que pasó, cantaría sus más grandes éxitos y parte de El camino de mi existencia, álbum que el año pasado grabó junto a Saúl Lallemand. “Nosotros somos fanáticos de los Carnavales por eso es que nos duele que nos pasen este tipo de cosas. Es una fiesta hermosísima, patrimonio de nosotros los colombianos y particularmente de los caribeños”.
Atento a las redes, fue testigo del revuelo que causó el “desaire” en Barranquilla El artista confiesa que le causó un poco de dolor el hecho, porque tenía un bonito espectáculo preparado, que le daba la talla a los artistas internacionales que se presentarían esa noche. “Muchas gracias por el respaldo, porque en las redes hubo una respuesta unánime por lo que sucedió. Seguimos firmes, no ha pasado nada. El homenaje pasó y yo este fin de semana vuelvo a encontrarme con mi público y el otro fin de semana también, no ha pasado nada”, enfatiza.
Villazón también dejó claro que las redes sociales son lo mejor que le ha pasado en la vida y es parte importante de su proceso como artista. “Son lo mejor del mundo porque hay una relación directa entre el artista y sus seguidores. Tenemos la oportunidad de contarle a la gente exactamente cómo fue que pasaron las cosas”, dice con una sonrisa pícara.
Tranquilo, Iván Villazón sostiene que volverá a la Arenosa y que su música permanecerá para quienes corean sus canciones.
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