Las rejas estaban cerradas y en la parte de afuera del edificio Balcones del Jardín, en la urbanización La Carolina, cerca de la Terminal de Transportes de Cartagena, se aglomeraban varias personas. Unas querían entrar y otras simplemente intentaban saber qué estaba pasando adentro.
Cuando el reloj marcaba las 2:30 de la tarde de ayer se escuchó que había una persona muerta en las instalaciones de la edificación en construcción. ¿Quién era? Se preguntaban los curiosos, que pronto se enteraron de que el nombre de la víctima era Tairon Marín Hernández, uno de los ayudantes de la obra.
Sus dolientes llegaron al sitio y se encargaron de dejar claro que son sus familiares cuando empezaron a “volarse” las rejas, ignorando las recomendaciones de los encargados de la seguridad en la construcción.
Minutos después, una patrulla de la Policía llegó y varios uniformados se encargaron de controlar la situación, impidiendo que siguieran ingresando a la zona residencial, a la que aún le falta mucho por terminar.
¿Sin seguridad?
Todo indica que Tairon estaba realizando labores en la parte en la que se deben instalar los ascensores, sin ningún tipo de protección, cuando cayo del piso nueve.
Sus compañeros fueron los que se dieron cuenta por el fuerte estruendo que escucharon de su impacto contra el suelo.
En el momento en el que llegaron a auxiliarlo descubren que no había algo que pudieran hacer por él. Tairon quedó bocabajo y sus signos vitales desaparecieron al poco tiempo de su caída.
Miembros de la Sijín llegaron al edificio para hacer la inspección técnica del cadáver horas después.
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