Eran constantes los gritos y agresiones verbales en una pequeña casa de madera de color rosado que está en la calle 18 del sector Isla de Belén, en el barrio Nuevo Paraíso. Sin embargo, ayer en la mañana todo estaba en silencio y un rumor de muerte corría entre los vecinos.
Hablaban de la suerte de Nelson Guerrero Gutiérrez, a quien su hijo Yesid Guerrero habría acuchillado en medio de una discusión. Las heridas fueron letales y el joven terminó entregándose a la Policía. “Esta muerte se dio porque el hijo de la víctima entró a defender a su abuela, quien era, al parecer, maltratada por el fallecido”, indicó el coronel Juan Carlos Rivera, comandante operativo de la Policía Metropolitana.
Nelson, a quien llamaban ‘el Búho’, vivía con su hijo Yesid y otros cuatro parientes, entre ellos su madre y una hermana. Era reciclador y vecinos indicaron que en su casa las peleas eran constantes. Aseveran que consumía drogas y que cada vez que lo hacía, agredía a sus parientes.
“Cuando él consumía, llegaba a su casa y agredía física y verbalmente a su hermana y a su mamá”, comentó un vecino. Se dice que el martes, desde las 6 de la mañana, en la casa del reciclador empezaron a discutir. A las 8 de la noche, Nelson empezó a pelear con una hermana porque, supuestamente, querían quedarse con la vivienda, propiedad de la madre de ambos. La madre de estos intervino. “La señora dijo que ella aún estaba viva, que dejaran de pelear por la casa”, dijo un vecino.
Yesid se metió en la discusión porque Nelson habría intentado pegarle a su abuela, y entonces sacó un cuchillo y lo habría atacado. Otra versión indica que Nelson habría atacado a su hermana y Yesid lo habría acuchillado por defender a su tía.
Nelson quedó tendido en el piso, con heridas en el tórax, la espalda y los brazos. Al ver a su padre herido, Yesid, de 23 años, lo cargó y lo sacó de la casa. “Ellos tenían su pelea ahí dentro, en la sala. Desde acá afuera solo se escuchaban los gritos y se veía cuando alzaban los brazos. Después vimos fue cuando traían a ‘el Búho’ lleno de sangre”, explicó el mismo vecino.
Yesid llevó a su padre al CAP de Olaya. Allí, los médicos confirmaron que el hombre acuchillado estaba muerto. Al enterarse, el joven de 23 años se quedó en el CAP y luego se entregó a la Policía, alegando que habría actuado en defensa de su abuela. La Policía indicó que será procesado por homicidio.
Por otro lado, está el caso de Alfredo Suárez Pérez. El joven de 20 años, vivía en la urbanización Villa Zuldani, junto a Villa Estrella. Era mototaxista y el martes en la mañana salió a llevar a su padre al trabajo, pero no regresó a casa. Horas después, lo hallaron tendido en un sector enmontado del barrio, con un balazo en la cabeza. Junto a este estaba su moto y tenía sus pertenencias. Lo llevaron a la Clínica Madre Bernarda, donde murió la noche del mismo martes. Se desconoce quién o por qué lo baleó.
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