Un duro golpe propinaron las autoridades en Córdoba. En plena noche de Navidad fueron capturados siete miembros que según las autoridades pertenecen a la estructura capital Pedro Vargas del denominado Clan del Golfo.
De acuerdo con lo señalado por la Policía, los detenidos eran solicitados por homicidio agravado y concierto para delinquir con fines de homicidio, pues habrían participado en la comisión de al menos 11 homicidios, 2 tentativas de homicidio en contra de uniformados de la Policía Nacional, como también en la planeación de otros 13 atentados en contra de la institución los cuales fueron neutralizados a través de acciones de inteligencia.
Indicaron que entre los atentados a los uniformados se encuentran la lesión causada al patrullero José Gabriel Sánchez Bustamante, el pasado 15 de noviembre de 2016 cuando este se encontraba en actos de servicio. Asimismo, el intento de homicidio al policía Emiro José Martínez Peinado el 25 de mayo del presente año en la urbanización Los Recuerdos de Montería.
Entre los capturados se encuentran José Joaquín Murillo Cáceres, alias Juaco, presunto cabecilla logístico y era el encargado de la parte logística y del almacenamiento de las armas de fuego, material de intendencia y víveres; Tatiana Marcela Escobar Borja, alias “La Reina” o “Alejandra”, quien tenía a su cargo la Secretaria y habría iniciado su actividad realizando actividades de inteligencia criminal para la comisión de homicidios y habría participado en cerca de 20 homicidios ocurridos entre los años 2015 y 2018; David Antonio Pérez Medina, alias “Chocolate, reportado como sicario, y Yair Antonio Díaz Borja, alias Jair, también sicario.
En la lista de detenidos figuran además Tatiana Marcela Escobar Borja, alias Alejandra o La Reina, quien habría participado en cerca del 50% de los homicidios ocurridos en los años 2014, 2015, 2016 y 2017; Jhon Jairo Suárez de la Cruz, alias “Periquito”, sicario; Jeison Muñoz Correa, alias Caquetá, integrante Bloque Sur de los Andaquíes de las extintas AUC quien posteriormente se vinculó a la subestructura Pedro Vargas, desempeñándose como sicario, y Onilso Biga Burgos, alias “Mico Yaranda”, desmovilizado del bloque Catatumbo de las autodefensas.
La Policía confirmó que desde hace varios meses les venían haciendo seguimiento, tras la queja de comerciantes y ganaderos de Montería, quienes denunciaron que venían siendo víctimas de extorsión.
Todos fueron puestos a disposición del juez de control de garantías, quien determinó enviarlos a prisión.
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