En una camilla hospitalaria, alejada por completo de la realidad, pasa largas noches Estefany Durán Rey. Sus días cambiaron dramáticamente en la madrugada del 19 de marzo, cuando fue ingresada a la Unidad de Cuidados Intensivos de la Clínica Barú.
Tiene 19 años y enfrenta una de las pruebas más duras que habría imaginado en su corta vida. En medio de tantas malas noticias, la peor aún no se la dicen.
Ama las pasarelas y sueña con ser profesional. Estefany quiere continuar con la carrera militar desde que se graduó de bachiller en el colegio Almirante Colón en 2017.
Sus metas a corto y largo plazo la motivan día tras día, pero en el momento menos pensado se vuelven un espejismo. Ese lunes festivo 19 fue arrollada por una camioneta en el barrio El Recreo, y su estado de salud frena todos sus planes.
Iba de parrillera en la moto de su novio, Edwin Chavarría, cuando fueron impactados. Él murió y ella queda luchando.
Al despertar del fuerte impacto, Estefany está conectada a varios aparatos médicos en UCI y desconectada de lo que pasa por fuera de su habitación. Sus padres no le han dicho que Edwin falleció en el acto.
Como ella son muchas las personas que han perdido a un ser querido o han terminado con secuelas tras sufrir accidentes. En la mayoría de los casos, las víctimas van en motos.
Campaña en las redes
Las redes sociales están llenas de la foto de Estefany los mensajes de apoyo son innumerables. Su tipo de sangre es O-, un Rh difícil de encontrar en los bancos de sangre. Por eso, conocidos, amigos, familiares y ciudadanos solidarios se unen a la campaña para invitar a todas las personas a donar sangre.
La joven sufre fractura de pelvis, laceración en la vagina; y afectación en la vejiga y la uretra. También se le sale un disco de la columna. Horas después del accidente, los médicos le operaron la pelvis y le hicieron la reconstrucción por la laceración. Esa es la información que dio el padre de Estefany, Jorge Durán, un día después de la tragedia.
Imprudencia
En la madrugada del 19 de marzo, iban varias motos. En ellas se transportaban varios amigos y delante de ellos transitaba una camioneta. De un momento a otro, Edwin Chavarría y otro joven -en otra moto- se pasaron el carro. Después de eso, nadie supo que pasó. Lo cierto es que el conductor de la camioneta atropelló la moto en la que iba la joven pareja y les pasó por encima. El grupo regresaba a casa, tras celebrar el cumpleaños del papá de Edwin.
Lo más lamentable en esta historia es que Estefany no es la única víctima grave que dejan las imprudencias en las vías.
En la Clínica Barú también es atendido un hombre que perdió la nariz y parte de la boca en un absurdo choque entre una moto y un colectivo.
En Olaya Herrera
Una de las calles cercanas al Cuartelillo del barrio Olaya Herrera es cerrada con vallas de la Policía a cierta hora todas las noches. Esa medida es la que un motociclista no tuvo en cuenta a la hora de cruzar con su moto.
Testigos aseguran que se pasó entre la vallas y chocó con una de las puertas delanteras de un colectivo, causándose una terrible herida en la cara. Con el impacto, algunos de los vidrios del vehículo se rompieron y se cortó la nariz y el labio superior. Sobre el pavimento quedó parte de su cara intacta, mientras que él fue trasladado al centro asistencial. Debió ser sometido a varias cirugías de reconstrucción.
El conductor del vehículo quedó capturado, por presuntamente manejar bajo los efectos del alcohol.
Vías sangrientas
La cifra de fallecidos en el primer trimestre de 2018 en Cartagena, hasta la fecha, está en 17. En enero murieron cinco personas, al igual que en febrero. En lo que va de marzo, son siete las víctimas. En Turbaco murieron dos, tras chocar en moto contra un camión.
Motos, peligro
La mayoría de las víctimas mortales de accidentes ocurridos en el primer trimestre de este año iban en motos. Entre enero y febrero murieron siete personas en motos. La mayoría son conductores. En marzo tres transeúntes han sido arrollados por motos y uno por Transcaribe. Dos motociclistas fueron atropellados por vehículos.
Atendidos por la ESE
Entre enero y febrero, la ESE Cartagena de Indias atiendió 61 pacientes por el Seguro Obligatorio de Accidentes de Tránsito (SOAT).
Arrollados
En lo que va de 2018, once personas han muerto arrolladas en Cartagena, dos de ellas por buses de Transcaribe, en la avenida Pedro de Heredia, frente a María Auxiliadora; y un extranjero cerca a la estación de La Bodeguita.
Semana Santa 2018
Pese a que hay una reducción de accidentalidad en comparación con el inicio de la Semana Mayor de 2017, este año más de 33 personas han fallecido y otras 32 han resultado lesionadas en por lo menos 29 accidentes. Según el director de Tránsito y Transportes de la Policía, el general Ramiro Castrillón, la disminución es de un 74 por ciento.
Movilidad
Desde la tarde del viernes -23 de marzo- se han movilizado más de 668.443 vehículos a nivel nacional. Hasta el lunes, la Policía había realizado unas 504 pruebas de embriaguez, de las que 56 resultaron positivas.
Pie de fuerza
En esta Semana Santa 50.000 integrantes de la Policía están distribuidos en toda Colombia para garantizar la seguridad de los ciudadanos. La Dirección de Tránsito y Transportes dispone de 8.000 uniformados y más de 4.000 vehículos en las vías del país para facilitar la movilidad.
Accidentes en 2017
El año pasado, durante la Semana Mayor, ocurrieron 1.289 accidentes que dejan 158 víctimas fatales y 1.682 lesionados.
Controles en Cartagena
La Alcaldía de Cartagena, la Armada, la Policía y la Dirección General Marítima -Dimar- intensifican los controles de seguridad, especialmente en los sectores de mayor afluencia turística. En las labores de seguridad en La Heroica y sus alrededores se hacen patrullajes marítimos y terrestres.
Vías principales
Las vías de Cartagena en donde se intensifican los controles por parte de la Policía de Tránsito y Transporte, durante la Semana Santa, son La Cordialidad, Troncal de Occidente y Vía del Mar, que es por donde hay mayor ingreso de viajeros.
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