Dos jóvenes murieron entre la noche del jueves y la madrugada de ayer, tras ser baleados en hechos aislados. Uno de ellos fue Gabriel Antonio Pérez Barrio, quien residía en el sector 20 de Julio, junto a San Francisco. La última vez que lo vieron vivo fue el jueves en la tarde, cuando llegó a casa de una prima en Pasacaballos y le pidió 2 mil pesos para coger un bus.
Ayer, a las 6 de la mañana, lo hallaron muerto en la llamada Loma del Sinaí, en las faldas de La Popa. Aunque sus parientes desconocen qué pasó, una versión deja ver que habría estado comprometido en un robo y miembros de una pandilla se dieron cuenta y lo siguieron, matándolo de cinco balazos: uno en un brazo, uno en el tórax y tres en la cabeza. “No sabemos qué pasó ni si estaba metido en problemas porque él nunca dijo nada. Nosotros lo regañábamos porque quería pasar en la calle, pero no hacía caso”, dijo Wendy Barrio, hermana.
El otro caso fue el de Víctor Alfonso Mosquera García, quien resultó herido el miércoles en la noche. Jugaba dominó junto al puente de la calle 47 de La María, cuando fue sorprendido por seis jóvenes, que querían hurtarle su celular. El taxista de 19 años se opuso y ello le salió caro. Le dieron dos cuchilladas en el pecho y un balazo en la cabeza. El joven fue llevado a la Clínica Crecer, donde murió el jueves en la noche.
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