Hasta la cárcel de máxima seguraridad de Valledupar será enviado Cristian Camilo Bellón Galindo, luego de que un Juez de Control de Garantían le dictara medida de aseguramiento intramural, por ser el presunto responsable de la muerte de cinco agentes y de haber herido a otros 41, luego del ataque terrorista perpetrado el sábado 27 de enero en la Estación del barrio San José de Barranquilla.
Durante de la segunda audiencia celebrada este martes por la mañana en el Centro de servicios Especiales de Barranquilla, el Fiscal 11, Ricardo Restrepo, le imputó los cargos de homicidio agravado, tentativa de homicidio agravado, terrorismo agravado, porte de armas de fuego, municiones y explosivos, utilización de re redes de comunicaciones y delitos con la la vida e integridad emocional de los animales.
Cargos a los que no se allanó, sin embargo las pruebas que habían recopilado los miembros de la Sijin y la Fiscalía fueron tan contundentes que el juez con control de garantías no tuvo más argumentos que enviarlo a la cárcel conocida como ‘La Tramacua, donde deberá permanecer hasta que se le realice el juicio por los delitos que le fueron imputados.
Cristian Camilo Bellón Galindo durante la audiencia
Dentro de las pruebas están videos y los documentos que se le hallaron en su poder el día de su captura, así como elementos electrónicos que le consiguieron en los allanamientos que se realizaron en la casa donde residía en el barrio Suba de Bogotá.
Otros aspectos que se tuvieron en cuenta fueron las recientes declaraciones dadas por el Ministro de Defensa colombiano, que lo vinculan con el ELN, ya que en el 2015 había capturado cuando se realizó un operativo en contra de esa organización, pero luego de un tiempo un juez lo dejó en libertad.
Bellón Galindo había solicitado para la audiencia un abogado y no el Defensor de Oficio que le había puesto el Estado, y es por eso que en la mañana de esta martes llegó desde Medellín, Yeison Manco López, quien estuvo en la audiencia, quien pidió que su detención fuera un centro de reclusión Bogotá, porque la vida de su defendido podría estar en peligro. Este argumento no fue aceptado por el Juez que le mandó a la cárcel de máxima seguridad de Valledupar.
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