La Universidad de Córdoba quedó literalmente paralizada luego de una trifulca de un militar uniformado con un estudiante, al parecer por un lío de faldas.
La historia comenzó cuando el cabo segundo del Ejército Leonardo Páez entró al centro de educación superior, con uniforme y fusil, a reclamarle a un estudiante, al parecer porque este sostenía una relación sentimental con su novia. Sin embargo, esta versión no ha sido confirmad aún.
Lo cierto es que cuando el suboficial golpeó al estudiante, se caldearon los ánimos de los demás universitarios, quienes intentaron lincharlo. El cabo tuvo que resguardarse en las oficinas administrativas, mientras que la turba enardecida lo llamaba para que se enfrentara a ellos.
Los estudiantes estaban molestos porque el militar había ingresado con uniforme y arma de dotación del Estado, hecho que no está permitido sino bajo circunstancias especiales.
Los trabajadores del área administrativa no pudieron ingresar a hacer sus labores porque el cabo estaba encerrado en el área para evitar que lo lincharan. A medida que pasaban los minutos los ánimos se caldeaban más y por ello el militar pidió un megáfoco para pedir disculpas públicas por lo que había hecho.
Explicó a los jóvenes que había tenido un problema con el estudiante y que éste había sido grosero con él. Sin embargo, esa disculpa no logró calmar los ánimos y cada vez le gritaban más palabras soeces.
En el epidosio tuvo que intervenir la Defensoría del Pueblo y la Personería de Montería. En medio de fuertes medidas el militar fue entregado a un grupo del Escuadrón Móvil Antidisturbios y a sus superiores quienes lo esperaban en la parte externa de la universidad. De igual forma fue escoltado por un grupo de estudiantes que no estaba de acuerdo con que lo lincharan.
Los militares anunciaron que adelantarán una investigación disciplinaria al miembro de la Décimo Primera Brigada, pero aún no han hecho un pronunciamiento oficial.
A esta hora hay normalidad en el claustro universitario aunque tampoco hay pronunciamiento formal por parte de la rectora del centro educativo, Alba Durango.
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