Con las pocas fuerzas que le quedaban, Carmen Carlina Suárez Narváez logró subir a su camioneta. La mujer, de 59 años, tenía una herida de bala en el pecho. Pese a ello, logró encender el vehículo y manejar desde la entrada de su finca La Candelaria, en el corregimiento San Rafael de Cortina, jurisdicción de Magangué, hasta un punto conocido como Cuatro Caminos. La pérdida de sangre hizo que la mujer perdiera el conocimiento y terminó saliéndose de la vía, hasta meterse en un potrero y chocar contra un árbol.
Un mototaxista que pasaba la ayudó, llevándola a Magangué, al hospital La Divina Misericordia. “Fue el hombre negro”, dijo la comerciante, refiriéndose al sujeto que le disparó. Instantes después, mientras los médicos trataban de estabilizarla, murió.
Las autoridades creen que Suárez fue baleada en la entrada de su finca, por uno de los dos sujetos con los que acaba de discutir, que le disparó a quemarropa. Del hecho hay varias versiones. Algunos creen que la comerciante fue baleada por atracadores que querían quitarle una gran suma de dinero. Las autoridades tienen otras hipótesis.
“La señora estuvo presa hace un tiempo porque le encontraron una granada en su casa. Tuvo una orden de captura y tenía una restricción para salir del país. Al parecer, al momento de ser abordada por los sujetos, con los que discutió, alcanzó a dispararles. Investigamos si el crimen tiene que ver con un problema que tuvo en San Pedro (Sucre), con un empleado. También analizamos otras causas”, indicó el coronel Jorge Vargas, comandante de la Policía en Bolívar.
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