El Hospital La Divina Misericordia, el más importante del sur de Bolívar y que presta sus servicios desde Magangué a distintas poblaciones de esta región y de municipios de Sucre, Magdalena y Cesar, está en una profunda crisis tras la falta de pago por parte de sus acreedores.
La deuda que ya supera los 83 mil millones de pesos tiene en jaque a más de 700 mil personas que llegan a esta entidad de salud, provenientes de unos 30 municipios, según lo afirmó Pedro Alí Alí, alcalde de Magangué. Dicha preocupación quedó plasmada en una carta que el mandatario le envió al ministro de Salud, Alejandro Gaviria Uribe.
El alcalde le pidió al Ministro su intervención para “lograr con la participación de la Supersalud y la Gobernación de Bolívar, una mesa de trabajo para conciliación, regularización y seguimiento al giro de recursos por parte de las compañías aseguradoras y que la Supersalud inicie lo de su competencia, investigación formal a las EPS que vienen incumpliendo el pago a través del mecanismo de giro directo en los términos de ley”.
Las deudas están discriminadas así: Régimen Contributivo, 16 mil 911 millones 529 mil pesos; Régimen Subsidiado, $44 mil 689 millones 845 mil; SOAT, $6 mil tres millones 34 mil; entes territoriales, $10 mil 598 millones 235 mil y Régimen Especial, $4 mil 947 millones 334 mil pesos.
De la misma manera, se conoció que de las EPS que entraron en proceso de liquidación se aprobaron reclamaciones en Caprecom, por $660 millones; y en Saludcoop, por $3 mil 145 millones.
Habla el Gerente
Lucio Rangel, gerente de la Fundación Renal, que opera la ESE La Divina Misericordia, dijo que ya se encendió la alerta para que se tomen las medidas a tiempo “y no esperar que se cierre un hospital para poder actuar”.
Agregó que desde el 2010 hasta la fecha la ESE pasó de 600 consultas al mes a 14 mil. El hospital logró aumentar la oferta de tal manera que lo que antes se atendía en Sincelejo, Cartagena, Barranquilla o Valledupar, hoy se atiende en Magangué. Es preocupante porque los servicios han aumentado gracias a que se atienden muy bien.
No queremos que este hospital vuelva a fracasar y estamos alertando a todos los entes, Gobernador, Alcaldía y Ministerio, pues no podemos quedar sin servicio. Desafortunadamente hoy solo se recauda el 50% del servicio prestado. Podríamos cerrar si el comportamiento de pago sigue en esa línea”.
Ante la situación, que se ha vuelto casi que insostenible, se optó por suspender los servicios ambulatorios a los usuarios de las EPS Ambuq y Comfamiliar. “Solo les estamos prestando el servicio de urgencias”, dijo.
Sostuvo que solo Ambuq les adeuda más de 14 mil millones de pesos, muy a pesar de que esta traía un buen comportamiento. “Ahí está la Superintendencia de Salud y el Ministerio, y no pasa nada cuando las EPS no pagan el giro directo que es una obligación de ley”, explicó el Gerente.
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