Mañana empieza en pleno la campana reeleccionista del presidente Juan Manuel Santos. ¿Cuál será su estrategia? ¿Qué hará con su mala imagen? ¿Cuáles son las prohibiciones como candidato por ser mandatario?
La Ley de Garantías, que por estos días está en boca de todo el mundo, indica en su artículo segundo que "la campaña presidencial tendrá una duración de 4 meses" antes de la fecha de elecciones (25 de mayo), pero el anuncio de Santos la anticipa. Lo cierto es que estar en el Gobierno y presentar resultados de gestión, y al mismo tiempo fungir como candidato, tiene una frontera tan difusa que solo la Procuraduría será quien decida si es lo uno o lo otro.
Desde el miércoles, Santos marcó en su discurso las pautas de lo que será su estrategia electoral en la contienda por la Presidencia en 2014.
¿QUÉ SIGUE?
FICHA TÉCNICA
La Gran Encuesta de Medios fue hecha por Gallup Colombia a 1.200 personas en 57 municipios. Los márgenes de error dentro de unos límites de confianza de un 95%, son para el total de la muestra +/- 3%; para el total de la muestra de Bogotá +/- 7.0%, Norte Caribe +/- 5.8%, Centro Oriental +/- 5.8%, Antioquia/ Eje Cafetero +/- 6.5% y Sur Occidental +/- 6.8%.
LA REELECCIÓN NO SOLO DEPENDE DE LA IMAGEN
La imagen del presidente Santos no es la que se esperaría para un mandatario que se quiere reelegir, partiendo del hecho de que comparado con el otro expresidente que optó por entrar en la contienda por un segundo mandato, en el momento de su decisión, tenía una opinión favorable que superaba el 70 por ciento. El primer mandatario, por el contrario, cuenta hoy con una opinión desfavorable que según la Primera Gran Encuesta de Medios, llega al 58,3 por ciento, mientras su favorabilidad se ubica en el 36,9 por ciento.
Sin embargo, no es lo único definitivo en una elección presidencial. Lo es, si fuera la intensión de un candidato ganar en primera vuelta, que no es lo común en la historia política de Colombia. Todo lo contrario, la mayoría de presidentes después de la Constitución de 1991 se han elegido en una segunda vuelta, en las cuales las alianzas políticas juegan un papel trascendental. Y en este último punto, Santos tiene a su favor la Mesa de la Unidad Nacional, a la que pertenecen los partidos más grandes del país, y que le ha servido como bancada gobiernista en el Congreso desde que empezó su mandato.
"Pocas veces un presidente puede disfrutar de la fuerza política y electoral de casi cuatro partidos, que son a la vez los mayoritarios, salvo dos o tres senadores que no están de acuerdo; pero Santos tiene el respaldo del Partido de la U, el Liberal, Cambio Radical y buena parte del Conservador", aseguró al diario El País el politólogo Fernando Giraldo. Esto, sin tener en cuenta que el presidente-candidato está en ejercicio, lo cual le da una ventaja que reconoce el Estado y por lo cual se ha tratado de restringir en los temas que señala la Ley de Garantías.
Pero aún con los puntos de más que da tener un Congreso a su favor y pujando por él, más la difusa línea entre la gestión del presidente y su campaña, Santos tiene sin duda unas debilidades de las que se aprovecharán sus opositores en contienda para enfrentarlo en el debate.
Es el caso del mal manejo de las marchas campesinas y los paros, la incapacidad de sacar adelante reformas importantes como la de la justicia, la salud y la educación. Según el analista Juan Carlos Florez, citado por El País de Cali, "este es un Gobierno de retórica, pero no de realizaciones y todo lo que ha prometido se quedó en veremos, como las famosas Autopistas, la solución a los problemas del campo, el regreso de las víctimas a sus tierras y la misma paz está en veremos. Lo que hace que sea un candidato derrotable".
Otro de los lunares que se desprende de la encuesta es que los ciudadanos sienten que la administración de Santos "no ha logrado detener la corrupción", tal como lo señaló el politólogo Juan Diego Sánchez, citado por El País.
LEY DE GARANTÍAS ES PARA TODOS
El presidente y todos los funcionarios públicos tienen restricciones desde que se inició la aplicación de la Ley de Garantías, o Ley 996 de 2005, que se expidió luego de que fuera aprobada la reforma constitucional de reelección presidencial, con la cual fue reelecto, en 2006, el entonces presidente Álvaro Uribe Vélez.
Desde entonces, lo que sucede es que cuando el presidente, vicepresidente o ambos, radican su intención de ir por la reelección presidencial, de inmediato la ley pone en funcionamiento unas prohibiciones que hasta que se realicen las elecciones quedarán vigentes y hacer lo contrario podría acarrear sanciones, por parte de la Procuraduría, por incurrir en una falta gravísima. Además, para el resto de funcionarios públicos la norma también trae restricciones, para tratar de blindar al Estado en elecciones y que no se afecte el erario para hacer política, ni en las regiones, ni a nivel nacional. En vista de que el presidente Juan Manuel Santos quiere reelegirse, la norma le aplicará casi que en su totalidad, no así para el vicepresidente Angelino Garzón, quien no ha dado muestras de querer ir con el primer mandatario por un segundo periodo. Hay entonces tres momentos que se deben mirar de la aplicación de la Ley de Garantías. Primero está una regla que todo funcionario público debe cumplir a cabalidad en todo momento: no se puede participar en política.
Luego entra en vigencia una segunda fase de restricciones, que corren seis meses antes de las elecciones de Congreso que serán el 9 de marzo. Es decir, desde el 9 de noviembre se pusieron en ejercicio varios apartes de la norma. En particular, lo que tiene que ver con la restricción a Santos para "inaugurar obras públicas, entregar personalmente recursos, referirse a candidatos o partidos en sus presentaciones como jefe de Estado, utilizar los símbolos de campaña en la publicidad del Gobierno, usar bienes del Estado con fines proselitistas, aumentar los recursos de publicidad, modificar la nómina estatal y la contratación directa por parte de cualquiera de los entes del Estado", según el abogado constitucionalista Juan Manuel Charry.
Esta lista de prohibiciones le aplicarán a Santos y a sus ministros hasta la elección presidencial, en primera y segunda vuelta, si llega a suceder. Al respecto María Eugenia Carreño, procuradora Delegada en lo Electoral exhortó a Santos para que "no comience los actos proselitistas con la protocolización de su intención el próximo lunes, sino en el momento de su inscripción, a partir del 25 de enero de 2014".
Las críticas a esta lista de prohibiciones vienen desde los municipios que argumentan que con esto se perjudica su administración. Sobre todo en lo que tiene que ver con contratos interadministrativos que no se pueden firmar, tampoco destinar recursos a las entidades a su cargo, ni inaugurar obras públicas con candidatos a la Presidencia, usar los bienes públicos para actividades proselitistas, ni mucho menos modificar la nómina. Las formas de contratación pública, como la licitación, sí se pueden aplicar.
SANTOS YA TIENE ESTRATEGIA DE CAMPAÑA
Santos es el segundo presidente-candidato que ha tenido el país desde la Constitución del 1991, tendrá una estrategia de campaña bastante similar al "Adelante presidente" que en su momento usó el expresidente Álvaro Uribe. Es decir, una búsqueda por la reelección basada en los logros de Gobierno y, sobre todo, en los temas que muestren las encuestas respecto a lo que los votantes buscan que mejore en el país. Desde el mismo discurso del presidente-candidato se notó el planteamiento de la estrategia que seguirá en su búsqueda por un Santos II.
"Ustedes me eligieron para crear empleo. Hemos cumplido. Superamos la meta de crear más de dos millones de puestos de trabajo, más que cualquier otro país de América Latina. Pero aún queda un número similar de desempleados, de compatriotas que buscan trabajo y no lo encuentran", indicó el primer mandatario durante el anuncio sobre su intención de reelegirse, que solo será oficial mañana cuando entregue la carta a la Registraduría.
Se trata del primer logro que trajo a colación el presidente en su discurso y concuerda con el tema que más preocupa a los colombianos según la Primera Gran Encuesta de Medios hecha por Gallup: el desempleo, que se llevó un 25,2 por ciento entre los problemas que deberán ser resueltos por el próximo presidente de Colombia.
Otro de los temas de Gobierno que resaltó el presidente fue el de la salud, que a pesar de ser por estos días fuente de polémica para el Gobierno, Santos aseguró que "hoy hay más colombianos con acceso a la salud, con planes de beneficios que incluyen más servicios, y comenzamos a bajar, por fin, el precio de los medicamentos".
A la vez se trata del segundo reto que trajo la encuesta sobre los asuntos que debe encarar el próximo mandatario: "la calidad y el cubrimiento de la salud".
Dos temas quedaron entre líneas, uno que incluirá el menor uso de la palabra Farc y otro que no se haya desplegado con más espacio en su alocución presidencial el programa de las viviendas gratis.
Primero, la negociación con la guerrilla en La Habana que ha tenido dos acuerdos, Santos se referirá a ella, en lo posible, sin nombrar al grupo subversivo que ha logrado tener la peor imagen en las encuestas con un 97 por ciento de desfavorabilidad. El uso de guerrilla o Farc, se cambiaría por la palabra predilecta de los mandatarios en proceso de negociación: Paz, de ahí que se use la técnica de la polarización para tratar de desacreditar a los críticos del proceso. La frase: "Un presidente que rechace la opción de hacer la paz no solo sería irresponsable sino que estaría violando el mandato de la Constitución y del pueblo", es muestra de ello. Por otro lado está el programa de las viviendas gratis, a los que se refirió en la mitad y que se ha visto como el programa estrella del Gobierno.
ENTREVISTA
"Vargas es la llanta de repuesto, el plan B"
IVÁN GARZÓN
Director de Ciencias Políticas Universidad de La Sabana
-¿Qué hará Germán Vargas Lleras en la campaña reeleccionista de Santos?
"Vargas es el jefe de campaña de la reelección. Él tiene un hábil manejo de la manzanilla y clientela popular, mientras Santos tiene el timón de la burocracia del Estado".
-¿Es posible que Vargas le compita a Santos?
"Vargas es la llanta de repuesto, el plan B. Será candidato sólo si la campaña por la reelección no despega y evidencia pocas posibilidades de triunfo. Un escenario de Vargas-Santos es improbable. Como hizo Santos hace 4 años, Vargas está esperando su mejor momento, consciente de que puede llegar en unos meses, o en cuatro años".
-¿Qué papel jugará Buen Gobierno?
"Ante un partido de la U desdibujado y engolosinado con la mermelada oficialista, Santos necesitó crear un centro de campaña entre sus fieles escuderos. Ése es el papel que cumple la Fundación Buen Gobierno".
EN DEFINITIVA
El presidente-candidato Juan Manuel Santos inicia desde mañana su campaña, pero al mismo tiempo sigue siendo el primer mandatario. Su estrategia se basará en presentar resultados de Gobierno.
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