Sin una previa convocatoria a la ciudadanía, el director del Datt, Jorge González Marrugo, se disculpó por el comentario, calificado de discriminatorio, que hiciera a través de su cuenta de twiter días previos a su designación en el gabinete de Dionisio Velez Trujillo.
Exhortado por el vicepresidente de la República, Angelino Garzón; González se pronunció en la Plaza de la Aduana, ante los medios de comunicación y sin mayor público que los transeúntes ocasionales, pidió excusas a los grupos étnicos, culturales o raciales de la ciudad, que por su proceder se hubiesen sentido vulnerados en su dignidad e identidad.
Hace algunas semanas, González escribió a través de twitter: “si Hitler hubiera conocido a los champetudos no se hubiera metido con los judíos”. La frase causó indignación entre los cartageneros por ser la champeta un ritmo considerado raizal e identificatorio de la cultura local y más aún cuando su nombre empezó a sonar para ser el nuevo director del Datt. El revuelo llegó al punto, que Angelino Garzón, en su visita a Cartagena, lo regañó públicamente por haber citado a un criminal de guerra en un comentario lesivo con la comunidad afrodescendiente.
En consecuencia, González se comprometió ante los medios de comunicación reunirse la semana próxima con líderes de organizaciones afro para llegar a acuerdos que permitan una reivindicación efectiva para superar el penoso episodio. Lea Nota: "El Director del Datt debe pedir publicamente perdón": Angelino Garzón
A continuación el comunicado, leído por Jorge González Marrugo, ante los medios de comunicación, en la Plaza de la Aduana:
Respecto del mensaje que se emitió por mi cuenta de TWITTER, que ha generado la indignación del pueblo cartagenero y Colombia manifiesto que:
1. Presento las más sinceras excusas, disculpas y solicito PERDÓN a todas las personas, grupos étnicos, culturales o raciales que resultaron por mi proceder, vulnerados en su dignidad e identidad.
2. He solicitado el acompañamiento de la organización CHAO Racismo, quien ha planteado para la próxima semana una reunión, con autoridades de la comunidad afro cartagenera y con líderes exponentes de la CHAMPETA, con el fin de buscar acuerdos que permitan una reivindicación efectiva para superar este penoso episodio.
Dicho encuentro generará acciones concretas para hacer de este acto desafortunado una oportunidad para la inclusión racial, lo cual debe quedar plasmado en un acta de perdón y compromiso que se convertirá en mi código de honor y que cumpliré a cabalidad. De no ser así, estoy dispuesto a dejar mi cargo.
3. Quiero por último manifestar que consagro desde hoy mi vida y mis conocimientos a erradicar prácticas discriminatorias, y desde mi cargo o por fuera de él, seré un soldado de la inclusión, reivindicaré al pueblo cartagenero y a la condición humana, en general; y si es menester, limpiaré mi imagen.
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