Editorial


Urge Casa Grande Caribe

EL UNIVERSAL

27 de julio de 2018 12:10 AM

La Silla Caribe de ayer publicó una excelente entrevista de Laura Ardila a Adolfo Meisel, hasta hace pocos días codirector del banco de la República y ahora rector de la Universidad del Norte. Meisel les recordó a los ocho departamentos de este litoral que la región debe trabajar unida para sacar adelante la iniciativa de la Casa Caribe, que no es más (ni menos) que combatir la pobreza.

Meisel piensa en una red de personas de todo el Caribe colombiano, que incluiría gente de su universidad, con entre 20 y 25 participantes por todo, “y tendría como agenda la de Casa Grande Caribe, pero sería básicamente para pensar los temas de la región. Justamente el nombre que quiero ponerle es iniciativa Casa Grande Caribe”.

Esta red es indispensable para hacer andar las soluciones, ya que no se llegará a nada si solo se habla de las necesidades del Caribe en cada foro, para luego bajar la guardia. Meisel nos recuerda, que tal como hicieron él y Jhorland Ayala con su estudio de Cartagena y de cómo sacarla de la pobreza, que “una de las ventajas de Casa Grande Caribe es que le puso números a la solución: solucionar el problema de la pobreza extrema en la región vale 16.500 millones de dólares y se puede financiar de unas maneras concretas”. Según Meisel, la gente debe convencerse de este hecho para luego exigírselo a los gobernantes del litoral Caribe.

El entrevistado rastrea nuestro rezago hasta la época colonial y la institución de la hacienda, y asegura que “La herencia de eso es una pobreza rural que todavía tenemos”, aunque asegura que se puede ‘enderezar’, pero “No lo hemos hecho porque no ha habido el interés”.

Hablando de Cartagena, Meisel dice que los 500 años de la ciudad se deberían celebrar trabajándole precisamente a acabar la pobreza, en especial porque ya tenemos una hoja de ruta con datos y costos, y evitar celebraciones inútiles, “(...) para que la gente que está en la peor situación allí tenga lo vital: agua, vías, colegios”.

Cartagena tiene unos proyectos para poder sobrevivir, como los canales pluviales, que afectan a muchas de las zonas más pobres; como la vía desde el túnel de Crespo hasta el hotel Caribe, que es esencial para el sector turístico, que es uno de los mayores empleadores de la ciudad, especialmente porque las nuevas fábricas serán cada vez más automatizadas y con cada vez más robótica, haciendo que la industria de servicios, tales como hoteles, restaurantes y entretenimiento, todos intensivos de mano de obra, sigan siendo claves para generar empleo formal.

Tienen entonces los líderes políticos, académicos, cívicos y gremiales de la ciudad una labor enorme por delante, ya que la pobreza aquí es enorme e inaceptable, y es indispensable gestionar recursos ante el Gobierno nacional para en verdad hacerle mella a la miseria. No es aceptable la ‘política como de costumbre’, porque se requiere usar el erario para el bien común, y no para enriquecerse personalmente.

Comentarios ()

 
  NOTICIAS RECOMENDADAS