La Unidad Deportiva “Fidel Mendoza Carrasquilla” debió ser tratada siempre como la “joya de la corona”, pues es el área donde confluyen miles de cartageneros a hacer deporte, que siempre ha sido considerado como un vehículo de paz, integración, recreación y esparcimiento.
Los Juegos Centroamericanos del Caribe, realizados en Cartagena en 2006, dejaron a la Heroica equipada con infraestructura deportiva. Los resultados para el deportista de Bolívar comenzaron a cambiar para bien a partir de ese entonces, tanto que el departamento es hoy potencia nacional.
Con escenarios a la mano de primer nivel, Bolívar comenzó a sacar pecho y cómo no hacerlo si en una misma área quedaron los escenarios del Estadio de fútbol Jaime Morón, Estadio de béisbol 11 de Noviembre, Parque de atletismo Campo Elías Gutiérrez, Complejo acuático Jaime González Johnson, Estadio de sóftbol Argemiro
Bermúdez y el Coliseo de Deportes de Combate.
Pero 11 años después de haberse realizado los Centroamericanos en Cartagena, entrenar, para muchos deportistas, se ha convertido en un martirio que no les permite desarrollar bien su talento.
La policía nunca ha podido garantizar la seguridad en esta zona cercana a los barrios de Olaya Herrera, Escallón Villa, República del Líbano, Los Ejecutivos, La Candelaria, Chiquinquirá, entre otros.
Los uniformados en la Unidad Deportiva siempre han sido insuficientes y cuando la institución ha querido redoblar la seguridad eso solo ha quedado en una buena intención de una o máximo dos semanas.
En todo este tiempo no se ha podido acabar con la delincuencia que pulula camino a estos escenarios. Los atracos se han vuelto algo común, pan de cada día. Hay pánico.
Celebramos la iniciativa del Ider, que presentó un proyecto al Gobierno nacional para encerrar la Unidad Deportiva, buscando acabar así con la inseguridad en la zona de deportes más emblemática de Cartagena.
Llegó el momento de dar la pelea y conseguir los fondos para por fin disfrutar de una gran zona deportiva, que además esté acompañada de personal de seguridad adentro y afuera.
Los deportistas no quieren más “paños de agua tibia” sino soluciones de verdad, más ahora que en el 2019, Cartagena y Bolívar serán anfitriones de los Juegos Deportivos Nacionales. Ojalá encerrar la Unidad Deportiva se dé muy pronto por el bien de deportistas y ciudadanos.
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