El presidente Duque designó a Pedrito Pereira como alcalde encargado de Cartagena mientras se define la inhabilidad del titular, Quinto Guerra Varela.
Pereira visitó ayer a El Universal y desde aquí le aseguró a los cartageneros que él es su propio jefe y no obedece a nadie tras bambalinas. Es decir, no viene a hacerle mandados a terceras personas ni a cuidar intereses particulares de nadie, sino los de la ciudad. Asume su encargo en medio de advertencias serias de la Procuraduría acerca de los problemas de Cartagena, y en particular de la Alcaldía, cuya contratación ha sido cuestionada por esta entidad e intranquiliza al grueso de la ciudadanía.
Pereira, quien además tendrá la veeduría de la vicepresidente de Colombia, Martha Lucía Ramírez, le aseguró a El Universal que él no aceptará contratación a dedo, sino licitaciones abiertas y con muchos proponentes. Además de la veeduría vicepresidencial, Pereira le pedirá a las “ías” que lo acompañen en los procesos, especialmente a la Procuraduría, entidad que como dijimos, ha estado muy pendiente de los acontecimientos en Cartagena, lo que el alcalde encargado asume de manera positiva como una fortaleza para su gestión, según le dijo a El Universal.
No sabemos cuánto tiempo estará Pereira al frente de la Alcaldía, pero además de todos los retos administrativos que tendrá que asumir, uno de los principales será restaurar la confianza dentro de la propia entidad, y de la población en la administración pública de la ciudad, y a la vez tratar de generar un clima de colaboración -no de claudicación- entre el Distrito y todos los sectores, incluyendo a la ciudadanía y al sector privado. Cartagena tiene que recuperar su gobernabilidad para trazarse un norte común entre todos los actores, cuanto antes.
Pereira aseguró que su prioridad será la gente pobre de la ciudad, y habló de la importancia del estudio de Meisel y Jhorland Ayala, que como recordarán los lectores, contribuye a entender la problemática de la pobreza con números y a señalar soluciones. Habló Pereira de buscar la manera de incentivar a las industrias para que se asienten en Cartagena, y tratar así de generar mucho más empleo formal. Comentarios similares les hemos oído a algunos concejales, por lo que hay un clima propicio para sacar adelante buenas iniciativas de ciudad.
El alcalde encargado le recordó a la ciudadanía que en el Congreso tuvo iniciativas importantes para la ciudad, como la Ley del Sitio, que permitió que fuera posible la defensa costera de Marbella a Bocagrande.
El alcalde encargado también nos habló de la urgencia de hacer entender al Gobierno nacional que la sedimentación del Dique puede llegar a impedir la entrada al puerto, por lo que financiar sus obras es indispensable.
Le deseamos suerte al alcalde encargado en su gestión, que ojalá represente mayor estabilidad para Cartagena y más tranquilidad para sus habitantes. Solo una buena gestión puede lograr estos objetivos.
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