En poesía sabemos que la unidad básica del verso regular es la sílaba; en el acentual, la cláusula, y en el libre, la palabra. Por la medida los versos son métricos si se ajustan a determinado número de sílabas y amétricos cuando no. Los hay monorrítmicos, cuando mantienen una disposición invariable en su estructura acentual y polirrítmicos, los que dentro de la misma medida presentan modificaciones. Las formas estróficas tienen según el número de versos su nominación. La estrofa propiamente dicha requiere de dos o más versos, aunque el verso único toma el valor de estrofa cuando sirve de molde a lemas, motes, proverbios y títulos. De ahí que poema es toda composición poética formada por versos. Verso, es cada línea de un poema. Estrofa, es un conjunto de versos relacionados por la medida y la rima o estructura.
En los festivales vallenatos denominan palabras a los versos, y con este nombre señalan a las estrofas. Es común escuchar “échese un verso de cuatro palabras o de diez”. Tuve un altercado en las pasadas fiestas patronales del pueblo, cuando escuché que Iván Zuleta alternaría “en diez palabras” con el decimero Julio Cárdenas. Le dije a mi contertulio que el repentismo de Zuleta no tiene la estructura de espinela, abbaaccddc. Analicemos esto que le cantó al presidente Santos, que arbitrariamente sería: ababbccddeefghgh, en donde inicia y termina con cruzados y entre ambos una seguidilla de pareados. “Es cosa que se respeta/ esto se lo digo yo/ en nombre de los Zuleta/ y de Darío Pabejeau/ que saludes le mandó/ allá de Valledupar/ y tengo que resaltar/ porque soy un buen guajiro/ Presidente yo me inspiro/ porque usted es un hombre grande/ y quiero manifestarle/ en nombre de todo el pueblo/ como colombiano quiero/ decirle y tenga presente/ las elecciones ligero/ pa’ que vuelva a ser presidente”.
El decimero Julio Cárdenas intercede: “lo que canta Zuleta se llama silva y no la termina cuando quiere sino cuando puede”. En este estilo de poesía no estrófica, los endecasílabos solos o acompañados de heptasílabos, rimados todos o en parte sueltos, se combinan libremente sin orden de estrofas. En sus respectivas épocas estuvieron inmersos en esta estructura de manera maestra y distinta, José María Heredia, Darío, Lugones, Machado, Reyes y otros. En algunos de ellos la rima se reduce a la asonancia de versos pares o silva arromanzada. Los modernistas, versos de varias sílabas en silvas sin rimas. Otros como Esteban Manuel de Villegas, quien manejó la forma no estrófica como la cantinela heptasílaba de rimas libremente repetidas, modelo este que apunta, en parte, a la teoría de Cárdenas, por aquello donde Zuleta se aproxima, pero sólo en las repetitivas rimas.
*Rotaremos este espacio para mayor variedad de opiniones.
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