La inseguridad es uno de los problemas que más preocupa a la ciudadanía en América Latina. Nuestra ciudad no es la excepción a esta regla. De acuerdo con Cartagena Cómo Vamos, el 41% de los cartageneros se siente inseguro en la ciudad. Estadísticas similares son reportadas por las encuestas de percepción que se aplican en otros países de la región. De esta manera y desafortunadamente, la violencia se convierte en un fenómeno regional.
Los índices de criminalidad latinoamericanos se encuentran entre los más altos del mundo. La tasa de homicidios de América Latina y el Caribe triplicó el promedio mundial en 2012: 24,5 por 100 mil habitantes frente a 8,4. Lo anterior sin comparar con países como Canadá (1,6), Francia (1,0) o Singapur (0,2).
También hay una alta variabilidad en la región. Desde Chile que tuvo una tasa de 3,1 hasta Honduras que registró un indicador de 90,4 en 2012. Esta variación se hace mayor en las ciudades al interior de los países. Por ejemplo, en Honduras se encuentra San Pedro Sula, que registró una tasa de 171,2 en 2014. De igual manera, se observaron tasas que superan los 100 puntos en Caracas (115,9) y Acapulco (104,1).
En un escalafón de las ciudades más violentas del mundo que realiza la organización mexicana “Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal”, 44 de las 50 ciudades con mayores tasas de homicidios por cada 100 mil habitantes se encuentran en América Latina y el Caribe. Por fuera de la región se encuentran en este listado las ciudades de Cape Town, Nelson Mandela Bay y Durban en Sur África, y San Luis, Nueva Orleans y Baltimore en Estados Unidos. Estas tres ciudades americanas tienen tasas mayores o iguales a algunas ciudades latinoamericanas.
Las ciudades colombianas que aparecen en el listado son Cali, que tiene una tasa de 65,2 y se ubicó en la posición 9, Palmira con 37,6 en la 32, Pereira con 34,6 en la 36, Cúcuta con 28,4 en la 47, y Medellín con 26,9 en la 49. El informe de la organización mexicana destaca el caso de Medellín como uno de los de mayor reducción en los homicidios. En 2010 la capital antioqueña ocupó la décima posición en el ranking con una tasa de 82,6 homicidios por cada 100 mil habitantes, pero en 2014 bajó hasta la posición 49 con una tasa de 26,9; es decir, que en 4 años la tasa descendió en un 67%.
A pesar de que algunas personas asocian la inseguridad con la elevada desigualdad en la región, no es clara la relación entre estas dos variables. Por ejemplo, Chile y Colombia tienen una de concentración del ingreso similar, pero la tasa de homicidios por 100 mil habitantes de Colombia es 10 veces mayor a la registrada en Chile. Probablemente la explicación del fenómeno podría estar más relacionada con el narcotráfico y la presencia de pandillas, elementos que, a su vez, no pueden ser desligados.
jbonetmo@banrep.gov.co
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