Chespirito fue (y es) el artífice de las risas de millones de personas en el mundo. Aunque su humor cruzó infinidades de temas de la sociedad, el fútbol siempre estuvo presente en los capítulos de la vecindad más famosa del planeta: El Chavo del ocho.
Capítulos en los que Don Ramón quería ver el partido de su equipo favorito, pero no lograba hacerlo por las travesuras del Chavo, Quico y la Chilindra.
En otros episodios, el patio de la vecindad sirvió como cancha de fútbol. Pero ¿de qué equipos eran hinchas los personajes de la serie?
El Chavo: Fue hincha del América. Casi siempre que se juntaba con Quico para jugar fútbol decía que era Enrique Borja, un exfutbolista mexicano del América, que fue ídolo de la hinchada en los 60' y 70' y que jugó los mundiales de Inglaterra 1966 y México 1970. Chespirito fue un gran aficionado al fútbol y en este deporte se inspiró para la película 'El Chanfle', en la que hizo el papel de un utilero que se convertía en figura de América, aunque en un sueño.
Don Ramón: Era hincha del Necaxa, uno de los clubes tradicionales de México. Don Ramón era un gran aficionado en los deportes y además del fútbol, en la serie del Chavo del ocho fue boxeador, futbolista americano, torero, guitarrista, entre otros. En su casa, colgaba banderines de los equipos más representativos.
Quico: Aunque siempre andaba con una pelota debajo del brazo y fue el compañero inseparable del Chavo a la hora de jugar fútbol, nunca reveló de qué equipo era hincha. Sin embargo, el intérpete del personaje, Carlos Villagrán vivió una gran experiencia relacionada con el deporte. Se inició como fotógrafo del diario 'El Heraldo' de México, con el que cubrió el Mundial que se realizó en ese país en 1970.
Villagrán contó a 'La Tercera' de Chile que en el Mundial vivió una de sus mejores experiencias. “Vi jugar al mejor equipo de la historia del fútbol (Brasil). Aún recuerdo a Pelé, Tostão, Rivellino, Jairzinho, Clodoaldo y Carlos Alberto. Era un equipo increíble", recordó a ese medio.
Señor Barriga: Era hincha de Monterrey, un equipo que para la década de los 70 tenía poca hinchada y era considerado pequeño. En uno de los capítulos, el Señor Barriga se dispuso a perdonarle el pago de la renta a Don Ramón si este confesaba ser hincha de Monterrey.
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