Una recompensa de hasta 200 millones de pesos para quien entregue información que permita capturar a los responsables del atentado en el que murieron el teniente coronel Alfredo Ruiz Clavijo, el patrullero Juan David Marmolejo y un civil, fue lo que anunció en Ipiales el ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, luego de presidir un consejo de seguridad.
Además, el funcionario notificó la llegada a Nariño de un Batallón de Fuerzas Especiales del Ejército que se encargará de desarrollar, en varias áreas, distintas operaciones tendientes a neutralizar las estructuras criminales y terroristas que operan en el departamento de Nariño.
Igualmente, Pinzón aseguró que en la ciudad fronteriza ya se encuentra instalada una unidad especial de inteligencia para dar con la detención de los autores que cometieron el atentado y posterior asesinato de los uniformados.
INVESTIGACIÓN
De otra parte, el ministro de Defensa dijo que otra de las medidas adoptadas es la llegada la próxima semana de 20 policías del área de inteligencia y Policía Judicial para el departamento de Nariño.
“Estos uniformados se encargarán de adelantar todo el proceso de investigación que nos permita dar con la captura de quienes perpetraron este crimen, así como de aquellos delincuentes y subversivos que, según nos han dicho varios alcaldes, estarían haciendo presencia en diferentes zonas de esta parte de la región”, expresó Pinzón.
Asimismo, explicó que las autoridades actualmente analizan la información de inteligencia sobre la presencia de una comisión de seis guerrilleros que habrían sido los autores del atentado en Córdoba. “Estos terroristas andan de civil y se movilizan en un carro marca Aveo y una motocicleta”, reveló el funcionario.
Agregó, entre otras de las medidas a adoptar, que la próxima semana llegará una agrupación de Fuerzas Espaciales Urbanas que tendrá como objetivo recorrer los municipios en donde existan preocupaciones o haya informaciones que le den confianza a los ciudadanos, así como presencia y capacidad de choque a las Fuerzas Armadas.
“Adicionalmente, en los próximos cuatro meses se integrarán ocho pelotones de soldados regulares y campesinos para los municipios de Córdoba, Potosí, Ipiales, Iles, Contadero, Gualmatán y Pupiales”, concluyó el saliente ministro de Defensa.
TRISTEZA POR MUERTE DE PACHITO
En el atentado donde murió un coronel de la Policía y un patrullero, también falleció el civil Carlos Andrés Valenzuela Barco, de 25 años de edad, conocido como Pachito, además el agente Leonardo Báez y, el enfermero Gustavo Adolfo Ñañes resultaron heridos.
Su padre Francisco Valenzuela Salcedo, recuerda a su hijo como una gran persona dedicada a trabajar y cuidar de su familia: “todo el pueblo puede dar testimonio de la calidad humana de Pachito, como le decíamos. Esperamos que este acto se aclare por el bien de todos. Queremos la tranquilidad para nuestro pueblo, solo eso pedimos”, dijo entre lágrimas Francisco.
Según el relato de sus familiares, Carlos Andrés, que trabajaba lavando carros en una estación de gasolina, se encontraba en el corregimiento llamado Santander, a 20 minutos de casco urbano de Córdoba, donde fue a visitar a su novia. Al promediar las 4:00 de la tarde, decidió retornar a su casa y para eso utilizó su moto.
En el recorrido se encontró a Gustavo Adolfo Ñañes, quien labora como enfermero en el centro Hospital San Bartolomé, el cual le pidió el favor de llevarlo hasta Córdoba. “Como era muy amable, se ofreció a trasladarlo hasta el pueblo si saber lo que pasaría”, dijo el papá.
COINCIDENCIA
A tan solo dos kilómetros de Córdoba, en el sector llamado La Guaca, se encontraron con la patrulla de la Policía y justo en ese momento ocurrió la explosión. Al parecer, luego de esto siguieron varias ráfagas de fusil, en ese momento Valenzuela Barco al tratar de protegerse se puso de pie y dio algunos pasos pero fue alcanzado por una bala de fusil que le perforó su ingle.
Gustavo Adolfo Ñañes, que iba como parrillero alcanzó a refugiarse en una alcantarilla. Luego de unos 20 minutos y de escuchar varias ráfagas de fusil Ñañes, fue trasladado hasta el centro hospital San Bartolomé de Córdoba, donde se recupera una fractura en la mano y en el pie.
Debido a la gravedad de las heridas, fue remitido hasta el Hospital Universitario Departamental de Nariño. Gustavo Adolfo, de 25 años de edad, es natural del municipio de Chachagüí.
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