Las Naciones Unidas en Colombia condenaron los hechos de violencia que se vienen presentando en la región del Catatumbo, Norte de Santander, por grupos armados al margen de la ley que están generando graves afectaciones humanitarias.
Según explicó el organismo internacional, al menos 144.000 personas se enfrentan a graves restricciones de acceso a servicios, bienes básicos y limitaciones a la movilidad; 2819 han tenido que desplazarse y no cuentan con garantías para su retorno; y 44.000 menores de edad que se han visto obligados a suspender su jornada educativa desde hace más de seis días.
“Hacemos un llamado de urgencia a todos los grupos armados a respetar la vida y la integridad de la población civil, respetar los derechos humanos, acatar el derecho internacional humanitario de manera inmediata y garantizar el acceso humanitario”, manifestó la ONU en un comunicado.
El organismo señaló que esta violencia viene menoscabando gravemente la vida y la integridad de los líderes locales. Varios miembros de las juntas de acción comunal y defensores de derechos humanos han tenido que desplazarse, confinarse, han sufrido daños a su integridad física y uno permanece cautivo.
“Expresamos a la población del Catatumbo toda nuestra solidaridad. Las Naciones Unidas está trabajando de manera cercana con todas las entidades locales y humanitarias para apoyar la atención de la población”, concluyó.
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