Dos semanas después del cierre definitivo que se le hizo a la “Zona U”, donde fueron selladas más de 10 discotecas por estar en una zona netamente residencial, los propietarios decidieron expresar públicamente su descontento con la medida.
Kathleen Torres, administradora de ‘Afrikan Club’, en vocería de los demás, aseguró ayer que el operativo fue inesperado e injusto, sobretodo porque el Distrito no tuvo acercamientos previos con ellos para buscar otras alternativas. “Se han visto perjudicadas más de 300 personas y sus familias. Se quedaron sin trabajo los de seguridad, personal de la barra, los meseros, los DJ, los administradores, los de logística. Es una situación lamentable, todo el mundo quedó en el aire sin nada que hacer”, dijo la propietaria.
¿Y la inversión?
Aparte de los desempleados, la clausura también afectó las inversiones millonarias que se habían hecho en los establecimientos y que, dicen los dueños, algunos aún no habían recuperado.
“Hay discotecas nuevas que ni habían generado utilidades. Sus dueños quedaron endeudados, debiendo hasta los arriendos. Por eso, de cierto modo también queremos una indemnización”, agregó Torres.
A raíz de esta inconformidad, los afectados recurrieron a un abogado que la semana pasada interpuso una tutela al Distrito, la cual se sustenta en el derecho al trabajo. De igual forma, este fin de semana en la noche, realizarán una manifestación pacífica en la zona para sentar su voz de protesta.
Medidas para mitigar
Conscientes de las problemáticas originadas en los alrededores y que afectaban a los vecinos, los empresarios tomaron ciertas medidas para mitigar los flagelos, precisamente evitando llegar a medidas tan extremas como el cierre definitivo de la “Zona U”. “El problema no son las discotecas sino factores externos, sin embargo estábamos trabajando y dando resultados. Se habían instalado vallas con acompañamiento de la policía, se unificaron los precios y se hacía filtro a través del cóver. Tenemos evidencia de esas gestiones, sí se había visto un cambio”, sostuvo Kathleen Torres.
Vecinos contentos
Sobre el cierre de las discotecas, Daniel Benavides, presidente de la Asociación Comunitaria de Vecinos Unidos, en su momento dijo: “Esta fue una lucha que dimos desde que montaron la primera en el 2014. En principio ahí habían casas normales, después los dueños vendieron y se convirtieron en oficinas y locales comerciales, pero todo cambió cuando empezaron a poner discotecas. Creció la inseguridad y aumentaron los problemas de orden público. Por eso se abrieron varios procesos disciplinarios para que las quitaran del sector, hasta que por fin el Alcalde cumplió con una resolución del Juzgado Primero Civil Municipal que ordenaba el cierre total y definitivo de esas discotecas en esta zona residencial”.
Las cerradas
‘Afrika’, ‘Jamaica disco-club’, ‘Dicaché’, ‘Ooopa’, ‘San Andrés’, ‘La vuelta disco-bar’, ‘Tu Playita’, ‘La fantastika’, ‘Mambo lounge- bar’ y ‘Kumba’, fueron los negocios afectados con la medida.
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