Grietas en las paredes y columnas deterioradas se notan a simple vista en el edificio Villa Ana, en la calle 7 de Agosto de Escallón Villa.
Las huellas que dejó la Constructora Quiroz en este inmueble mantienen en vilo a sus propietarios, quienes le abrieron las puertas a El Universal dos semanas después de que el Distrito les recomendara a través de una carta que evacuaran voluntariamente sus inmuebles, teniendo en cuenta que según un estudio patológico aplicado por la Universidad de Cartagena el edificio no cumple con la norma NSR-10 (norma colombiana de sismo-resistencia).
Lorena*, quien vive desde hace tres años en esta propiedad, a la cual le aportó una cuota inicial de $45 millones, rompe el silencio.
“No podemos aferrarnos a las cosas materiales. Sé que muchos tienen miedo y están apegados a estos apartamentos, que compraron con bastante esfuerzo, pero la vida está por encima de todo y si los estudios salieron desfavorables, hay que acatarlos”, dijo.
Por montón
Fue la misma propietaria quien mostró las más de 10 grietas que tiene su apartamento, el cual tiene fisuras en las paredes de la cocina, de todas las habitaciones, en el techo y hasta en el balcón.
“Hay muchas grieta, se han abierto las columnas y paredes. Además, hay unas vigas que se sienten huecas, cuando se tocan se siente como si estuvieran vacías por dentro”, contó.
Lorena aseguró que esta situación se viene presentando desde hace año y medio, situación que es preocupante puesto que el edificio fue entregado hace tres años. La mujer también afirmó que los constructores siempre han hecho caso omiso y que a ella, junto a su esposo, les ha tocado resanar las paredes.
“Le solicitamos a la Constructora Quiroz los estudios del suelo y el de sismo-resistencia y ellos entregaron unos papeles que terminaron siendo falsos. Ese fue el primer engaño que nos hicieron al momento de comprar nuestra vivienda propia. Lo grave es que las notarías hicieron caso omiso a estos documentos ilegales”, dijo.
Dolor de cabeza
Otro problema que desvela no solo a Lorena, sino a decenas de familias perjudicadas por la constructora, es su situación financiera, ya que las deudas con los bancos no se frenan.
“Hicimos un crédito con el banco y no sabemos hasta cuándo debemos seguir cancelando, porque tenemos que salir del edificio por órdenes del Distrito y no tenemos los medios.
“Estamos pagando la deuda del banco, estudios de mis hijos y ahora a pagar arriendo. Necesitamos que el Distrito nos diga hasta cuándo vamos a tener que pagarle al banco y que nos garanticen una vivienda digna”, afirmó.
Se reunirán
El miércoles de la semana que viene los propietarios de Villa Ana se reunirán con funcionarios del Distrito en el palacio de La Aduana, en el Centro. Allí les socializarán los resultados de los estudios patológicos.
En este encuentro, las más de 20 familias de este edificio plantearán sus dudas, en especial las relacionadas a las deudas con los bancos y posibles subsidios en el caso de que sea obligatoria la evacuación.
*Nombre cambiado por petición de la fuente.
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