Cuando en el ámbito nacional se revivió la polémica por el uso de coches turísticos en el Centro Histórico de Cartagena, por cuenta de los supuestos hechos de maltrato hacia los equinos denunciados en redes sociales, la Asociación de Cocheros de Cartagena busca aclarar lo sucedido ante la opinión pública y detener las acusaciones que desde entonces han recibido.
Con una iniciativa desde el ejercicio de su misma actividad laboral, la Asociación se declara en contra del maltrato animal y así pretende extender el mensaje entre cartageneros y demás ciudadanos del país.
“Queremos que nos reconozcan como parte del patrimonio de Cartagena, porque eso somos los cocheros y los coches turísticos para la ciudad. Queremos dejarle claro a la opinión pública que estamos en contra del maltrato animal, se está tergiversando lo que en realidad ha sucedido con los caballos. Están haciendo shows mediáticos que nos están afectando demasiado”, expresó Yesid Soto, miembro de la Asociación.
Para apoyar su iniciativa, los cocheros lucirán, mientras realicen su trabajo, camisetas en las que se lee “Soy cochero, soy patrimonio histórico. No al maltrato animal”. En la actualidad, son 120 caballos los utilizados para el servicio de coches.
NUEVOS HERRAJES
“El objetivo de todo esto es cambiar la imagen con la que tratan de mostrarnos. Hace más de un año empezamos a tomar correctivos, como cambiar el 50 por ciento de los caballos que prestaban el servicio de cocheros, eliminar pesebreras que estaban lejos del Centro y solo concentrarlas en Chambacú y Marbella, entre otras cosas. Hay que eliminar ese pensamiento de que los cocheros son maltratadores. Los cocheros están conscientes de que el caballo es su herramienta de trabajo, no se concibe que alguien maltrate su elemento de trabajo”, aseveró Julio Martínez, presidente de la Asociación.
Entre las medidas que aseguran estar tomando para mejorar la prestación del servicio de coches turísticos y prevenir incidentes en los que los caballos puedan resultar lesionados, está la conformación de una brigada de atención a los equinos, integrada por cocheros capacitados por el Sena y la Umata; y el cambio del tipo de herraje que se utiliza por uno que minimice las caídas de los animales.
“Se dice que los caballos se están desplomando, cuando no es así. Se desplomaran si les diera un ataque o algo parecido, pero lo que ha pasado últimamente es que los caballos se han resbalado y por eso caen. Todo ser que camine tiende a resbalarse o caerse. Sumado a eso, en el Centro los coches tienen que andar junto a motos eléctricas, vendedores ambulantes, bicicletas con motor, agua regada en las calles, factores que pueden llevar a que un caballo resbale y caiga en cualquier momento”, señaló Yesid Soto.
Según argumentan los cocheros, una situación similar sería la que habría ocurrido el pasado 10 de enero en la Plaza de Los Coches y que dio lugar a la divulgación masiva de un video donde denuncian un presunto maltrato a un caballo cochero. De acuerdo con la versión de los cocheros, el caballo resbaló luego de alterarse por un movimiento brusco que hizo un mimo en el sitio. “Yo intenté levantarlo, pero se resbaló nuevamente. Ahí llegó un grupo de personas que alteraron aún más las cosas. En esa situación, el caballo se puso más nervioso y yo también. No saben el mal que está causando ese video a mi y a mi familia”, dijo Alexander Soto, el cochero que maniobraba el vehículo durante el incidente.
“Por eso, estamos haciendo las pruebas con dos caballos para ver cuál es la herradura más adecuada a utilizar. Ahora estamos probando un tipo de herradura en caucho, pero también evaluamos traer del exterior otra herradura que es parecida a un taco, a ver si se puede usar acá”, agregó.
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