Los habitantes de la carrera segunda, en el corregimiento La Boquilla, pidieron a la empresa Aguas de Cartagena que haga mantenimiento a dos manjoles que se encuentran atascados con materiales sólidos.
Lo anterior, según los nativos, hace que en momentos de lluvias los manjoles se desborden e inunden las calles con aguas servidas.
Anticel Polo Poletti, una de las afectadas, explicó que desde la calle 90 hasta la 95 todos los manjoles están atascados con piedras, que son residuos de materiales de construcción que cayeron por accidente o que alguien arrojó.
“Hace dos días --añadió-- vinieron operarios de la empresa Aguas de Cartagena a descongestionar uno de los manjoles, que ya había llenado toda la calle de excrementos, pero no fue una solución definitiva”.
Aseguró que cuando ocurren esos percances, “nos toca encerrarnos en nuestras casas o caminar por las orillas de la calle para no ensuciarnos con ese material putrefacto, sobre todo los niños cuando van para el colegio”.
Franklyn Marrugo Sánchez, otro nativo, relató que “los niños que estudian en el colegio Skinner están en alto riesgo de graves enfermedades, porque Aguas de Cartagena no hace un mantenimiento eficaz, a pesar del sin número de llamadas que hemos hecho al 116 pidiendo el Camel”.
La empresa Aguas de Cartagena informó que el alcantarillado de la zona en cuestión sufre reboses, porque en uno de los registros echaron una piedra, que está a 1,8 metros de profundidad.
“Pensamos que había una emergencia sanitaria, pero no es así. De todas maneras, la próxima coordinaremos otra visita para extraer la piedra”, anunció la compañía.
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