Los usuarios del sector 20 de Enero, en el barrio El Pozón, manifestaron que no quieren seguir recibiendo energía eléctrica, mediante el sistema comunitario.
La información la dio, específicamente, el presidente de la Junta de Acción Comunal de dicho sector, Elver Méndez Chico, quien explicó que los usuarios no están conformes, “porque lo que se estipula en las facturas no necesariamente es lo que uno consume en su residencia”.
Señaló que en 20 de Enero hay muchos inmuebles, tanto familiares como comerciales, que consumen bastante energía (algunas veces de manera pirata), “y no es justo que todos paguemos lo mismo, cuando no todos consumimos de la misma forma”.
En ese sentido, hizo saber que, durante el día, en muchas viviendas solo permanecen una o dos personas, “el resto está en sus trabajos o planteles educativos, de manera que no vemos de qué forma se puede consumir tanta energía en un día”.
De acuerdo con Méndez Chico, casi la totalidad de las familias que viven en 20 de Enero no reciben grandes ingresos o están desempleadas, por lo cual “no se justifica que una factura les llegue hasta por más de ochenta mil pesos, además de un seguro que cobran y que abulta las cifras”.
El caso, según el líder comunal, no se presenta únicamente en 20 de Enero, sino también en los sectores La Unión y La Estrella.
La gerente de Electricaribe en Bolívar, Ayleen Álvarez Martínez, explicó que el cobro de consumo distribuido comunitario obedece al esquema de medición y facturación comunitaria propio de la zona especial a la que pertenece el sector de 20 de Enero, dadas las condiciones de pérdidas que prevé la distribución de la factura comunitaria.
“Dicho mecanismo --indicó-- fue implementado con fundamento en lo establecido en la Ley 812 de 2003 como forma de dar viabilidad a este tipo de zonas dadas las condiciones que presentaban y ponían y continúan poniendo en riesgo la prestación del servicio en la misma. De ahí que se articularon diferentes mediadas, tales como los esquemas diferenciales de prestación del servicio y el apalancamiento de recursos como el FOES y el aporte mismo de la empresa, para estos efectos”.
Reiteró que, “si bien el concepto de consumo comunitario distribuido se incluye en la facturación del usuario, el mismo no incrementa el valor a pagar por cada usuario individualmente considerado, como quiera que se ve disminuido por el aporte de la empresa, tal como se detalla en la misma facturación emitida en la zona”.
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