La Institución Educativa de Ternera no atenderá a sus estudiantes hasta que se arreglen los destrozos en la sede, provocados por las intensas lluvias del pasado fin de semana, y se determine que es un lugar seguro.
Este colegio, que tiene menos de un año construido, fue víctima del paso del huracán “Matthew” porque, según los docentes, no se arreglaron a tiempo unas filtraciones en las cubiertas que fueron reportadas semanas atrás ante la Secretaría de Educación.
“Matthew” provocó daños en el cielo raso y en el sistema de electricidad, lo que ocasionó que paredes y pisos transmitieran toques eléctricos.
La Secretaría de Educación informó el lunes pasado que en efecto recibió las quejas de las filtraciones de agua en las cubiertas, pero que es el contratista quien debe asumir la reparación de estas, porque la obra está en garantía. Los daños recientes sí serán arreglados por el Distrito.
“Pasamos el requerimiento a los interventores para que se lo hagan saber a los contratistas y reparen los desperfectos”, dijo un vocero de la Secretaría de Educación.
“Hoy (ayer) hicieron un reporte que llevaron a la Alcaldía y nos dijeron que enviarán a un ingeniero eléctrico, un arquitecto y a un ingeniero civil para evaluar los daños”, afirmó Édgar Ferrer, docente del colegio afectado.
La comunidad educativa reprochó la situación porque pudo ser prevenida y resaltó que con esto se pone en evidencia las falla estructurales de la construcción, entregada por la administración del exalcalde Dionisio Vélez.
Son mil alumnos los afectados con la suspensión de clases.
Este lunes, docentes y directivos encontraron así varios salones del colegio Ternera. //CORTESÍA
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