Dos meses y medio de nacido tiene el bebé que esta semana se convirtió en el centro de un hecho que parecía, a todas luces, lamentable.
Según las primeras versiones que se conocieron, el lunes pasado el menor fue encontrado en una hamaca dentro de una finca en Henequén. La Policía Metropolitana atendió el caso, luego que una mujer que reside en la finca, ubicada en una trocha del barrio, hiciera una llamada a la línea 123 asegurando que dejaron abandonado al menor.
“La mujer manifestó a los uniformados que una joven se acercó a su vivienda solicitando que cuidara a su hijo. Cuando la propietaria de la finca se niega por no conocerla, aprovecha un descuido y deja al bebé en una hamaca en la terraza del inmueble”, informó la Policía en su momento. (Lea aquí: Bebé de dos meses fue abandonado en una finca de Henequén)
Sin embargo, este medio estableció que el jueves en la tarde la Comisaría de Familia que atendió el caso entregó el bebé a su madre, tras confirmar que no se había tratado de un abandono.
LA MADRE ES VENEZOLANA
“La mamá apareció la misma noche buscando a su hijo. Manifestó que al regresar a la finca donde dejó al bebé y no encontrarlo, fue a la estación de Policía de Los Caracoles y allí le informaron que el niño estaba en la Comisaría”, explicó el comisario de familia, Amín Sanabria, agregando que pese a eso el menor debió permanecer a cargo de una madre sustituta durante cuatro días.
El funcionario indica que la madre del pequeño fue valorada y entrevistada, y así explicó que “ese día ella tenía que hacer una diligencia y dejó al bebé en la finca con las hijas de un hombre que le colabora con alimentos, porque ella es venezolana y se vino a parir a Cartagena. Pero supuestamente la compañera de este hombre la cela con él y por eso al ver al bebé en su finca, llamó a la Policía y dijo que había dejado al bebé abandonado”.
Junto al niño encontraron una maleta con teteros y una carpeta con documentos que identificaban al menor y a su madre.
De la madre del bebé se supo además que reside en Henequén y es hija de padres colombianos que viven en Valledupar, pero aún no ha tramitado los documentos para permanecer en condición regular en el país. Por tanto, el menor tampoco ha sido registrado, solo cuenta con un certificado de nacido vivo que le entregaron en el hospital en el que nació.
“El menor no evidenció signos de maltrato y el caso tampoco fue un abandono. El niño tuvo que estar cuatro días con una madre sustituta mientras se hacía el proceso en la Comisaría, a pesar de todos los inconvenientes que hubo para ubicarlo en un hogar sustituto, porque ninguna de las madres quería recibirlo ya que decían que estaban con sobrecupo en sus hogares”, dijo Amín Sanabria.
SOBRE ABANDONO DE MENORES
Según estadísticas del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), regional Bolívar, en lo que va de 2017 han sido reportados a la entidad 17 casos por abandono en los 8 centros zonales de la regional Bolívar. Dos en el Centro Zonal Virgen y Turístico, 4 en el Centro Zonal El Carmen de Bolívar, 5 en el Centro Zonal Histórico y del Caribe Norte, 3 en el Centro Zonal Industrial y de la Bahía, uno en el Centro Zonal Magangué e igual número en el Centro Zonal Mompox y Centro Zonal Simití.
El año pasado el reporte fue de 33 casos: 9 en el Centro Zonal Virgen y Turístico, 7 en el Centro Zonal El Carmen de Bolívar, 3 en el Centro Zonal Histórico y del Caribe Norte, 5 en el Centro Zonal Industrial y de la Bahía y 9 en el Centro Zonal Simití.
“Sabemos que hay familias que tienen dificultades y están en riesgo por situaciones como problemas en el embarazo, su condición socioeconómica, condiciones afectivas o son familias numerosas, entre otras, pero lo recomendable es que en estos casos se acerquen al ICBF y soliciten acompañamiento, que muy probablemente con los programas que ofrece el instituto o bajo medidas de protección se pueden buscar soluciones. El instituto tiene a su disposición la línea telefónica 141, en donde las familias pueden pedir atención psicosocial con profesionales que pueden escuchar sus necesidades”, manifestó Lenny Cuello, directora encargada de la regional Bolívar del ICBF.
Miguel Gloria, abogado y defensor de familia de la regional Bolívar del ICBF, explicó que cuando hay casos de abandono “lo que toca es restablecer el derecho del menor a tener una familia, por lo que lo primero que hay que hacer es buscar su red familiar nuclear y extensa, y además valorarla, porque puede que aparezca la familia, pero quizás no tiene las condiciones para garantizar los derechos del niño. Si el caso es así, posteriormente puede haber lugar a una declaratoria de adoptabilidad. La Ley 1098 de 2006 (de Infancia y Adolescencia) establece que el periodo para la búsqueda de esa red familiar nuclear y extensa es de seis meses, sino se inicia el proceso de adoptabilidad”.
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