Las versiones de la Universidad de Cartagena y de la familia de una menor de 17 años, quien presuntamente cometió suplantación de identidad durante el examen de admisión, siguen sin concordar por lo que tanto para los entes de control como para la opinión pública es confuso saber quién tiene la razón.
Es por esto que la única solución para este caso es que se haga un cotejo para verificar si la huella del examen de admisión coincide o no con la de la tarjeta de identidad de la menor involucrada, quien fue admitida en Medicina.
Precisamente esto era lo que se pretendía hacer en días atrás cuando Unicartagena citó a la jóven, habitante del barrio La Sierrita, y a otros cuatro aspirantes que tienen el mismo problema, pero el procedimiento no se pudo realizar.
De acuerdo con los familiares de la estudiante, ellos atendieron el llamado del alma mater pero el cotejo de huellas no se realizó porque no se presentaron los otros jóvenes ni los representantes de la Defensoría del Pueblo ni la Personería Distrital, que fueron citaron para que sirvieran de garantes en el proceso.
La UdeC, por su parte, dijo que el proceso no se realizó porque si bien fue cierto que la estudiante se presentó, a través de su abogado expresó que no accedía a que se hiciera el cotejo de huellas.
Ninguna de las versiones puede ser corroborada por los entes de control que fueron llamados a hacer parte del proceso.
Proceso de matrícula sigue suspendido
Un vocero de Unicartagena explicó que como el cotejo de huellas que propuso para adelantar el proceso no fue posible, deben esperar a que la Registraduría y la Fiscalía den resultados de las investigaciones que la institución les pidió adelantar, con las pruebas del caso y que mientras esto ocurre el proceso de matrícula está suspendido.
“Debemos asegurarnos de que no hubo fraude porque se le estaría quitando la oportunidad a otro estudiante de ingresar a la universidad”, dijo el vocero.
Carmelo Zúñiga, padre de la menor, afirmó que ella “quedó en el aire”. “Esta situación perjudicó a mi hija porque estaba estudiando inglés y tuvo que suspender sus clases por este problema. Nos tienen ‘bailando el indio’ y necesitamos una solución”.
El padre de familia declaró que no tiene dudas de que “fueron escogidos para destapar lo que pasa en la Universidad de Cartagena”, por lo que llevarán el caso hasta las últimas instancias.
Demanda penal preocupa a la Personería
Jairo Benito Revollo, personero delegado de la Personería Distrital que atiende el caso, explicó que no asistió al cotejo de huellas porque recibió la citación faltando una hora para el cotejo de huellas y que no le fue posible cuadrar la agenda.
Indicó que el proceso sí podía ser realizado a pesar de su ausencia y se mostró preocupado por la demanda penal que interpuso la Universidad de Cartagena contra la menor, por el delito de suplantación de identidad.
“Es cierto que las versiones son distintas pero estamos atentos para que a la menor se le garanticen sus derechos. Hemos pedido informe sobre todas las actuaciones alrededor de este caso para intentar esclarecer lo sucedido”, señaló.
Benito Revollo explicó que para resolver el caso serán vitales los resultados que arroje la Registraduría, entidad a la que se le solicitó comparar la huella del examen de admisión con la del documento de identidad de la joven.
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