Un incendio forestal arrasó 10.000 hectáreas en una región de bosques secos y obligó a evacuar a casi un centenar de personas en el oriente boliviano, informaron el martes las autoridades.
El fuego, que comenzó el jueves, obligó a la evacuación de los pobladores de varias aldeas, dijo el alcalde José Eduardo Diez, de la localidad de Roboré, 900 kilómetros al este de La Paz.
Soldados, guarda parques y voluntarios tendían un cerco el martes para evitar que las llamas avanzaran hasta el poblado de Chochis y el Parque Nacional Tucavava, una zona de bosques secos cerca de la frontera con Brasil.
Cerca de la zona unas 15.000 hectáreas de bosque fueron arrasadas a mediados de agosto. Los vientos propagan el fuego en este temporada seca y de altas temperaturas, dijo Diez.
Según la Autoridad de Bosques y Tierra el martes se registraban al menos 258 focos de calor en regiones del oriente y al menos siete fueron incendios, dos de ellos graves.
Agricultores y ganaderos suelen quemar en esta temporada para habilitar áreas de cultivo y renovar pastizales. Muchas quemas derivan en incendios forestales de magnitud, según las autoridades. Los autores de incendios que salen de control son sancionados por el Estado.
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